Así lo manifestó tras la victoria de los talibanes en Afganistán, quienes ayer domingo se hicieron con el palacio presidencial de Kabul.

“Las vulnerabilidades extremas y el miedo están en niveles récord y los niños están en mayor riesgo de violencia, abuso y explotación. Las familias que ya están luchando por sobrevivir a la indigencia relacionada con este conflicto, a una sequía devastadora y a los efectos de la Covid-19, están recurriendo ahora a las medidas más desesperadas para proteger a sus hijos, incluido el matrimonio infantil”, explicó Asuntha Charles, directora nacional de World Vision en Afganistán. “La historia ha demostrado que la resistencia y la fortaleza del pueblo afgano son extraordinarias. Pero tiene sus límites. Ahora están en su punto más vulnerable y no podemos abandonarlos”, añadió.

En este sentido, World Vision pidió a todas las partes del conflicto dar prioridad a las niñas y los niños vulnerables, respetando el derecho internacional humanitario y dando prioridad a las vidas de los niños afganos, sus familias y sus comunidades. Asimismo, pidió que la comunidad internacional mantuviera su presencia sobre el terreno para evitar una catástrofe humanitaria sin precedentes, así como un aumento del compromiso y la continuidad de las ayudas financieras, el compromiso diplomático, la responsabilidad internacional para las soluciones duraderas y la protección de los derechos de los niños.