El incremento es notablemente mayor al compararlo con junio de 2020, cuando se contabilizaron 25.709 compraventas de casas, una cifra afectada por el confinamiento y la ralentización de la actividad en ese mes.

Sobre los datos del mes de junio de 2019, los registradores remarcan que en ese mes se produjo una ralentización del número de hipotecas inscritas, que afectó también a las compraventas que acompañaban a esas hipotecas, como consecuencia de los cambios producidos a través de la Ley 5/2019, de 15 de marzo, reguladora de los contratos de crédito inmobiliario, que provocó un aumento de hipotecas realizadas en junio e inscritas en julio.

En cuanto al número de hipotecas inscritas este junio, 35.532, suponen un incremento del 27,2% sobre las 27.945 registradas en junio de 2019.

Con relación a la evolución anual por comunidades de las compraventas totales en el mes de junio respecto al mismo mes del año anterior, con relación a junio de 2020 se producen aumentos en todos los territorios, estando por encima del 100,0% en Aragón, Castilla–La Mancha, Madrid y Melilla.

El análisis mensual de la evolución anual de compraventas e hipotecas inscritas en los registros de la propiedad durante los últimos doce meses, de julio de 2020 a junio de 2021, muestra en el apartado de compraventas una tendencia paulatina de recuperación, solo interrumpida en los meses de octubre de 2020 y enero y febrero de este año. A partir de marzo, por coincidir con los meses del primer estado de alarma y las restricciones económicas que llevó aparejadas, la evolución muestra repuntes con mucha fuerza. En mayo se produjo el mayor incremento de la evolución anual, el 145,9% en las compraventas totales, y el 108,4% para las compraventas de vivienda, ralentizándose en junio por primera vez este año, hasta el 83,6% las totales y 76,7% de crecimiento para las de vivienda, mostrando, por tanto, incrementos todavía muy elevados.

En cuanto a las hipotecas totales, los datos mostraron una mayor resistencia que las compraventas durante los primeros meses de la pandemia, en los que se observaron intensas caídas, recuperándose en los meses de agosto y, sobre todo septiembre de 2020, cuando se produjo un incremento del 22,1% en las hipotecas totales. La situación empeoró desde ese mes hasta enero de este año, mostrando una evolución positiva hasta marzo. Desde ese momento las hipotecas han mostrado una senda sostenida de elevada recuperación con crecimiento anuales cada mes superiores al 30% en cada mes analizado.