Según la información difundida por las autoridades, los agentes de la Guardia Civil de Vitoria y Bizkaia se encontraban desarrollando desde hacía varios meses las operaciones ‘Konposatu y Estacha’. Su objetivo era el desarme de un laboratorio ubicado en la localidad de Dima (Bizkaia), donde los agentes sospechaban que un narcotraficante bilbaíno estaría realizando labores de elaboración y distribución de droga en País Vasco.

Las pesquisas policiales concluyeron que el laboratorio se ocultaba en una casa aislada, en un paraje rural en la citada localidad con paso acotado y de difícil acceso, donde se “cocinaban” las sustancias que después transformarían en “speed” o MDMA. También lo adulteraban de forma que fabricaban la droga conocida como “tusi” o cocaína rosa, LSD o el sildenafilo.

Estas investigaciones lograron acreditar la relación personal de este individuo con otro de Gipuzkoa, dando origen a la operación ‘Elurra’ y en la que posteriormente resultaría detenido este guipuzcoano. Paralelamente se investigó a un grupo organizado que producía y distribuía sustancias estupefacientes en todo el territorio nacional. Los agentes tuvieron conocimiento que esta red estaba asentada en Gipuzkoa y estaba formada por cuatro personas que tenían perfectamente definidos sus roles dentro de la organización.

ROLES PERFECTAMENTE DEFINIDOS

Uno de ellos era el “cocinero” o “químico” de la sustancia, que se encargaba de la transformación del aceite de “speed” en la sustancia comercializada, multiplicando la cantidad recibida considerablemente utilizando sustancias de corte. Otro se encargaba de la seguridad del laboratorio y el suministro de las sustancias necesarias. A su vez, un tercero distribuía la mercancía elaborada y la ponía a disposición de otros traficantes situados en diferentes localidades del territorio nacional. Finalmente, el cuarto, se encargaba de la distribución a otros “narcos” de localidades repartidas por todo el territorio nacional.

Con esta desarticulación, se han aprehendido 53 kilos de “speed” que podrían haber alcanzado un precio en el mercado de más de un millón y medio de euros, convirtiendo esta actuación de la Guardia Civil en el decomiso de metanfetamina más importante de los últimos años en Gipuzkoa y la segunda más grande de España en este año.

Asimismo, se llevaron a cabo otros dos registros en los que se incautaron más de 5.000 euros en efectivo, un revólver simulado, una pistola de descargas eléctricas, 5 básculas de precisión, 760 gramos de cocaína en roca, 10 kilogramos de hachís, 3 kg de cogollos de marihuana, 1 kg de speed. Asimismo, se decomisaron 95 g de resina de hachís; 9 plantas de marihuana de cultivo “indoor” doméstico; 16,8 g de pastillas de éxtasis; 32 g de ketamina; 79,7 g de MDMA; así como sustancias para el corte y manipulación de las sustancias estupefacientes.

Tras este hallazgo, los investigadores de dos de las operaciones lograron desmantelar un importante laboratorio de similares características en Bizkaia y detener a dos personas por sendos delitos de tráfico de drogas. Las cantidades incautadas hubieran alcanzado en el mercado ilícito un valor superior a al millón de euros. Además, poseía como medida de seguridad un arma de fuego real y dos perros en el interior de la vivienda. Los seis detenidos fueron puestos a disposición de los juzgados de instrucción nº 2 de San Sebastián, nº 1 de los de Pamplona, nº 3 de Durango y nº 8 de Bilbao. La investigación continúa abierta.