Según informó este miércoles la Policía, los arrestados cobraban hasta 6.000 euros por pasajero bajo la promesa de viajar en embarcaciones grandes y rápidas que, posteriormente, no resultaban ser más que embarcaciones de recreo.

Los investigadores comenzaron al tener conocimiento de la llegada de una embarcación al Puerto de Algeciras en la que viajaban a bordo 10 ciudadanos extranjeros, uno de ellos menor de edad.

La organización criminal sustrajo una embarcación de recreo en el Puerto Deportivo de Ceuta, con la que realizó el traslado de los ciudadanos extranjeros que habían conseguido acceder a la ciudad autónoma desde Marruecos. Una segunda embarcación sufrió una avería y comenzó a hundirse con ocho inmigrantes a bordo, llegando a pasar verdaderos momentos de pánico hasta que fueron rescatados por una patrullera de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera.

En ambos casos, las personas encargadas de pilotar la embarcación se hicieron pasar por víctimas migrantes para tratar de eludir la investigación policial, siendo descubiertos por los agentes de la Policía Nacional. Ambos han sido puestos a disposición judicial, ingresando en prisión uno de ellos.