Así lo refleja un nuevo estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) que analiza 38 leches semidesnatadas ultrapasteurizadas y que, según la organización, revela “significativas diferencias” de calidad entre las marcas, principalmente como consecuencia de las pruebas de degustación.

Estas “faltas” han sido detectadas por un equipo de cinco jueces expertos especializados en productos lácteos y, junto a su evaluación, en laboratorio también se evaluaron aspectos como el aporte nutricional, el tratamiento térmico, el envejecimiento, la acidez, la presencia de estabilizantes, la higiene y posibles fraudes.

En estas pruebas también se detectaron problemas como el de sobrecalentamiento en el proceso de esterilización de algunas leches, que implica una pérdida de aminoácidos esenciales y vitaminas o una cierta falta de frescura, que, según OCU, aunque no son problemas de seguridad para los consumidores, "sin duda influyen en su calidad final”.

La organización señaló que sólo siete de las 38 marcas analizadas pueden calificarse como “muy buenas”, si bien prácticamente todas las leches obtienen una calificación como mínimo aceptable.

MUY BUENAS

De entre las muy buenas, la organización mencionó la leche semidesnatada de Hacendado (Mercadona), que tiene a su favor una buena nota en calidad de procesado y degustación, destacando aspectos como la cremosidad y la intensidad de su sabor, además de su bajo precio (0,58 euros el litro).

En este punto, advirtió de que las marcas de distribución son, de media, un 22% más baratas que el resto, ya que es un producto que suele utilizarse como reclamo.

Junto a ello, el estudio puntualiza que cada vez es más frecuente que en los envases de leche se muestren certificados sobre los cuidados que recibe el ganado, como el de bienestar animal o el de leche de pastoreo. Se trata, según OCU, de informaciones que el consumidor valora “de forma muy positiva, aunque de momento no parece que influyan en la calidad final de la leche”.