Casado se pronunció en estos términos al presidir la plenaria conjunta de los grupos parlamentarios del PP en el Congreso y en el Senado, después de que Sánchez anunciase desde Barcelona que mañana propondrá en el Consejo de Ministros conceder el indulto a los nueve líderes independentistas condenados por su participación en el ‘procés’.

“Ha usado una medida de gracia para dar un golpe de gracia a la legalidad, pervirtiendo la figura del indulto para concederlo por primera vez a quien no lo solicita, no se arrepiente y además amenaza con reincidir”, denunció el presidente del PP, para quien Sánchez “blinda un segundo ‘procés’” y pretende dar continuidad “a su proyecto de cambio de régimen”.

Es más, el líder de la oposición enjuició que la salida de Pablo Iglesias del Gobierno y de la vida política “ha dejado al desnudo” que Sánchez es “el responsable de esta agenda extravagante y suicida para nuestro país”. “Es el político menos fiable y más destructivo de nuestra historia democrática”, sentenció.

Casado avisó de que el PSOE, Unidas Podemos y los nacionalistas intentan hacer “el régimen que quieren” y buscan que no haya espacio para una alternativa en un momento de “crisis inducida” por ellos mismos. “Lo que pasa en Cataluña se utiliza ahora como coartada para un cambio de régimen, es decir, la deslealtad hacia el sistema se eleva a argumento contra el sistema y contra quienes lo defendemos” en vez de “contra esos desleales”, se revolvió.

Según su análisis, Sánchez no está intentando aprovechar una oportunidad histórica para arreglar un problema nacional, como hoy esbozaba, sino que “aprovecha ese problema causado por el supremacismo de sus socios y el apaciguamiento del PSOE para dar continuidad a su proyecto de cambio de régimen”. “Destruye las bases de nuestro sistema de convivencia y desarma sistemáticamente al Estado con varias iniciativas letales” para España, alertó.

Cargó contra Sánchez por la concesión de estos indultos a los condenados del ‘procés’ y también por “pretender asentar la impunidad modificando el delito de sedición a la carta de los fugados que aún no han sido juzgados por la Justicia española”, además de “permitir que el Consejo de Europa ponga en duda la calidad democrática de nuestra Justicia” y “pretender hacer un referéndum, según él legal, con la excusa de recuperar el Estatut inconstitucional”.

El líder de los populares tampoco perdió ocasión para denunciar que Sánchez vaya a “reactivar la mesa de la amnistía”, a lo que unió que “promueve la debilidad penal y administrativa frente a posibles nuevos golpes a la legalidad negándose a apoyar la tipificación de referéndum ilegal” tal y como se comprometió en campaña electoral.

“DESFALCO DE SOBERANÍA”

“¡Todo este desacato a la legalidad y todo este desfalco de soberanía pretende presentarlo hoy en formato de ópera bufa en el Liceo de Barcelona!”, exclamó Casado. Mientras esto sucede, también lamentó que Oriol Junqueras “presume de la debilidad del Estado con los indultos”, mientras que Jordi Cuixart “anuncia la derrota que sufrirá España”, Quim Torra “habla del paternalismo colonial de España” y Carles Puigdemont “ridiculiza sus propuestas”.

En este punto, Casado rememoró cómo hace unos meses se redactó en el Congreso un “ignominioso manifiesto por la democracia” en el que el PSOE estampó su firma junto a la de “tan excelsos demócratas” como los miembros de la CUP, EH Bildu, ERC o Junts Per Catalunya, partido este último del “inolvidable Torra, alias Gandalf para los terroristas de los CDR (Comités de Defensa de la República) que le reportaban”.

“Esos (los CDR)”, prosiguió Casado, que “estuvieron siguiéndonos para atentar contra mí y otros compañeros del PP”, según la Guardia Civil y la Justicia. Se quejó de que aún no ha oído una condena del Gobierno en este sentido a pesar de que ellos lo “exigían” durante la campaña madrileña cuando recibían sobres con balas o navajas.

Casado siguió hablando entre el aplauso de los presentes para subrayar que “en esta ocasión ha sucedido algo extremadamente grave” y es que “el Gobierno tuvo conocimiento de estos hechos durante la campaña electoral de noviembre de 2019 y no sólo no nos informaron, sino que negaron esta información cuando les preguntamos”.

ACCIONES LEGALES

“Se ve que estaban demasiado ocupados desenterrando dictadores del siglo XX como para ocuparse de defendernos de terroristas del siglo XXI”, recriminó el líder del PP, y anunció que “nos reservamos las acciones legales oportunas para determinar la incompetencia o las responsabilidades que correspondan” por ello.

Casado sostuvo que “el sanchismo ha devorado al socialismo constitucional” con la receta de “dividir al país” al negociar “con todos los desleales” para “expulsar al PP” y “subastando lo que no se puede para seguir en el poder”. “Nos quieren fuera de cualquier negociación porque la negociación es para echarnos fuera”, apuntó.

Así las cosas, preguntó cómo se puede hablar de fortalecer las bases de la convivencia mediante un proceso que “premia a los golpistas” y también “cómo no sentir sonrojo ante un PSOE para que justificar la voladura de la Transición pretende apropiarse de su autoría para justificar su derecho a destruirla”.

El líder de la oposición hizo especial hincapié en que “no hay grandeza alguna en los extraños compañeros de cama que Sánchez ha logrado para su causa”. Es más, enjuició que sólo expresan “su debilidad económica y moral” y opinó que eso es lo que se ha visto en el Liceo: “Una supuesta sociedad civil rota y débil entregada a un Gobierno con dinero pero sin principios”.

Tras estas severas críticas a Sánchez, Casado se centró en el PP y dejó claro que “nuestros únicos accionistas son los españoles”, pues “sólo a ellos nos debemos”. “A ningún editorial, a ningún consejo de administración”, especificó ante sus diputados y senadores. “Seguiremos defendiendo a los catalanes moderados y cumplidores de la ley, nos voten o no nos voten”, indicó a los suyos.

“NO PERDER EL ALMA”

“Preferimos perder votos antes que perder el alma, al contrario de lo que hace Sánchez”, subrayó, para a continuación recalcar que “deben terminarse las ambigüedades y las posiciones de ventaja”. “Quien no quiera secesión, debe enfrentarse a quienes la impulsan y no a quienes la combatimos”, apuntó.

Ahondó así en que “el apaciguamiento no es una opción”, sino que “es sólo un aplazamiento que otorga nueva fuerza a la amenaza”. “Querer a Cataluña es devolverle estabilidad institucional y empuje económico, es abrirle caminos de verdadera convivencia, concordia, reformismo, igualdad y libertad”, trasladó.

“No se puede premiar a una minoría que violenta las normas”, incidió, y reseñó que “la respuesta no puede ser ofrecer una España al gusto de los que la quieren deshacer”. “No aceptamos volver a hablar de amnistía” porque “implica falta de libertad y aquí no falta más libertad que la que los nacionalistas nos roban”, apostilló.

Para Casado, cada vez “más millones de ciudadanos” están “hartos” del socialismo “que blanquea al separatismo”. “Hartos de esos falsos moderados que nos dan lecciones por servirse del delito y comprender al delincuente”, llegó a decir, recriminado así que “se remunere al desleal en lugar de exigirle que pague lo que debe en justicia”.

“Reencuentro, sí. En la Constitución y en la ley”, determinó el presidente del PP, asegurando que “ahí nos reencontramos con quien sea”. “pero sólo ahí cabemos todos y sólo ahí podremos convivir”, dijo entre al aplauso de los presentes. “Pero eso no es lo que quieren”, lamentó instantes después.

TRAMPA

Abundó en su recurrente aviso de que “los nacionalistas quieren que España y lo que representa deje de existir”, al tiempo que “Sánchez quiere que el PP y lo que representamos deje de existir”. “Sánchez necesita a los nacionalistas para que el PP deje de existir y es ese el pacto de los indultos trampa”, advirtió.

Por eso, afirmó que es “indispensable para la continuidad histórica de España” que “el PP se mantenga en su sitio” y gane las próximas elecciones generales. “No vamos a permitir que nuestra agenda nacional vuelva a estar en manos de los que quieren a España en vía muerta”, señaló el presidente de los populares.

Se refirió aquí a la Convención Nacional del PP y explicó que su objetivo es que sea “abierta a toda la sociedad, sin reservar derecho de admisión ni número de butaca”, y sobre todo que sirva para construir un proyecto de todos y que es “la alternativa a las mentiras de la pandemia, la incompetencia económica, el ridículo internacional y el pacto de los indultos trampa”.

Terminó su alocución remarcando que “ahora es el tiempo de la defensa de España”. “Es nuestra razón de ser y nunca permitiremos que nadie la destruya para perpetuarse en el poder. Estaremos a la altura de lo que construyeron nuestros padres; estaremos a la altura de lo que merecen nuestros hijos”, prometió.