Según justificó Exteriores, España es partidaria de que Palestina figure como miembro de la Unesco, y también como estado observador en la ONU, pero, tras tratar en vano de coordinar una posición común con los 11 estados de la UE que forman parte del Consejo Ejecutivo (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Eslovaquia, España, Francia, Grecia, Italia, Letonia, Polonia y Rumanía), al final optó por la abstención.

Del resto de países europeos, votaron en contra Alemania, Letonia y Rumanía y se abstuvieron Bélgica, Dinamarca, Eslovaquia, Francia, Grecia, Italia y Polonia. España basó su abstención en que habría preferido que la cuestión se hubiera planteado después de que Naciones Unidas tome una decisión sobre la iniciativa palestina, y teniendo en cuenta las perspectivas de reanudación de las negociaciones de paz con Israel.

La votación de la Conferencia General de la Unesco está prevista para el próximo periodo de sesiones, entre los días 25 de octubre y 10 de noviembre. El Gobierno, por las razones señaladas, consideraría aconsejable retrasar la votación, pero anunció que votará favorablemente en la Conferencia General si finalmente no se aplaza y tampoco se consensúa una posición común de la UE.