El Ministerio de Salud de Gaza calcula que, desde la tarde del 10 de mayo hasta hoy, los ataques aéreos israelíes han matado ya a 67 palestinos -entre ellos, 17 niños y niñas-, y han causado cerca de 400 heridos.

Por su parte, las autoridades israelíes han notificado la muerte de siete personas durante ese mismo periodo de tiempo a consecuencia de los cohetes y misiles lanzados por grupos palestinos de Gaza.

Según Hellen Ottens-Patterson, coordinadora general de MSF en los Territorios Palestinos Ocupados (TPO), "los bombardeos israelíes son increíblemente intensos y más fuertes que en anteriores campañas". "Los constantes bombardeos han destruido muchas casas y edificios a nuestro alrededor”, agregó. “No es seguro salir a la calle y nadie está tampoco seguro dentro de los edificios; la gente está atrapada”.

Durante la noche del lunes 10 de mayo, los equipos de MSF prestaron apoyo a la Media Luna Roja Palestina para la exploración y estabilización de cientos de pacientes heridos por la policía israelí, la mayoría de los cuales habían sufrido traumatismos y heridas por balas de goma y granadas aturdidoras.

MSF, presente en la zona desde hace más de veinte años, subraya que los 14 años de bloqueo israelí sobre Gaza hacen que el sistema sanitario de la Franja carezca de muchas de las herramientas necesarias para tratar a los pacientes, incluso en tiempos normales. Sin embargo, apunta, “cada pocos años, los hospitales tienen que hacer frente a una enorme afluencia de heridos”: unos 11.000 durante la guerra de 2014; más de 7.000 heridos de bala durante las protestas de 2018 y 2019, y los cientos de heridos y decenas de muertos que ya han causado los bombardeos que llevan produciéndose desde el pasado lunes.