World Vision emitió un comunicado de condena después de que este sábado una explosión causada por un coche bomba y morteros en las inmediaciones de la escuela de secundaria Sayed ul Shuhada en Kabul se cobrase la vida de alrededor de 50 personas y dejase heridas a más cien, la mayoría de ellas niñas.

En ese sentido, la directora de World Vision Afganistán, Asuntha Charles, lamentó que, “una vez más, niños inocentes han sido víctimas de un ataque cruel y sin sentido” que ha dejado a un sinnúmero de familias en “el más absoluto dolor y devastación”.

Esto le sirvió para poner de manifiesto que “cuando una niña o un niño va a la escuela, espera aprender, jugar, crecer y vivir” para garantizarse un futuro en el que “desempeñar un papel brillante para ellos, sus familias y sus comunidades. Este es su derecho”.

Luego de exigir que la violencia y los ataques “cesen de inmediato”, advirtió de que “los niños y niñas en Afganistán están al límite”, por lo que “su seguridad y protección deben ser prioritarias para todos los responsables”.

De este modo, conminó a todos los actores afganos a trabajar para lograr una “solución pacífica” que proteja el futuro de los menores del país.