Pandemia
Unicef alerta de que el “mortal” aumento de casos en el sur de Asia puede tener un “impacto desproporcionado” en los niños
- Cree que esta tendencia “amenaza” con revertir los avances contra la Covid-19
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Unicef alertó este martes de que el “mortal” aumento de casos de Covid-19 en el sur de Asia puede tener un “impacto desproporcionado” en los niños y “amenaza” con revertir los avances logrados hasta ahora a nivel mundial contra el avance del coronavirus.
Así lo subrayó el director regional de Unicef para Asia meridional, George Laryea-Adjei, en una declaración en la que reconoció que las escenas que se están presenciando en esta área “no se parecen a nada que la región haya visto antes”.
“Los familiares de los pacientes piden ayuda mientras la región sufre una grave escasez de oxígeno medicinal y los exhaustos trabajadores sanitarios están al borde del colapso”, denunció, convencido de que la zona se enfrenta a una “posibilidad real” de que sus sistemas de salud “lleguen a un punto crítico”, lo que, a su juicio, “provocaría aún más pérdidas de vidas”.
En este punto, hizo hincapié en el “profundo impacto” que tiene la pandemia en los niños, que se ven afectados directamente por la enfermedad “en mayor número que nunca”. “Están perdiendo a sus padres y cuidadores, convirtiéndose en testigos de escenas que ningún niño debería ver jamás y quedando aislados de sus escuelas y redes de apoyo vitales”, agregó.
El responsable de Unicef para Asia meridional subrayó que la primera ola de la pandemia provocó recortes “drásticos” en la disponibilidad y el uso de los servicios de salud pública esenciales en el sur de Asia, lo que “costó la vida" de aproximadamente 228.000 niños y 11.000 madres. “Simplemente, no podemos permitir que esto vuelva a ocurrir”, espetó.
A este respecto, consideró “indispensables” la acción “urgente” acompañada de un “liderazgo firme” para “detener la catástrofe” y aseguró que los gobiernos "deben hacer todo lo que esté en su mano para detener la devastación y los aliados que puedan enviar ayuda deben hacerlo de inmediato”.
Así, urgió a la comunidad internacional a “dar un paso adelante sin demora”. “No se trata solo de un imperativo moral, la nueva ola mortal en el sur de Asia nos amenaza a todos”, sentenció, convencido de que dicha ola “tiene el potencial de revertir los logros mundiales contra la pandemia, conseguidos con tanto esfuerzo, si no se detiene lo antes posible”.
“No olvidemos nuestra responsabilidad individual. Puede que estemos exhaustos, pero el virus aún no lo está”, abundó, urgiendo “ahora más que nunca a comprometernos” con el respeto a las medidas de protección para contener su propagación.
Junto a ello, advirtió de que los índices “tan bajos” de vacunación en el sur de Asia incrementan la probabilidad de que el virus “se salga aún más de control” y recordó que casi en todos los países de la región, con la excepción de Maldivas y Bhután, se han vacunado menos de una de cada 10 personas, por lo que llamó a asegurar que las dosis “lleguen de manera equitativa a todas las poblaciones” así como a aumentar la fabricación, repitiendo el mensaje de que “ninguno de nosotros está a salvo hasta que todos lo estemos”.
(SERVIMEDIA)
04 Mayo 2021
MJR/clc