“Condeno toda la violencia, como no puede ser de otra manera”, añadió Ayuso, quien indicó que “lo que no puede ser es que también aquellos que provocan esa violencia luego se hagan los ofendidos, y no puede ser que haya políticos en este país que pretendan blanquear los pactos con el entorno político de ETA”.

A su juicio, “simplemente el hecho de coquetear o de blanquear a personas como Otegi o a una banda terrorista, te demuestra que tú eres el primero que te estás equivocando. Y, por tanto, no puedes seguir por ese camino”.

Ayuso hacía estas declaraciones después de que la candidata de Vox, Roció Monasterio, cuestionara la veracidad de esas amenazas, lo que provocó que el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, abandonara un debate electoral en la Ser.

Dijo que hay partidos como “Podemos que vienen de permitirlo y estos días vienen a la Comunidad de Madrid cada vez más ciudadanos que huyen de sus políticas, de lugares de España como ha sido el País Vasco, donde han sido realmente agresivas y han acabado con la vida de mucha gente y han causado mucho dolor”.

Por otro lado, pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que “abandone su campaña contra Madrid”.

Explicó que a Pablo Iglesias no le va a “pedir permiso” para ir a dar mítines por cualquier localidad; tampoco a la ministra de Educación, sobre a qué colegio debe llevar a sus hijos; ni a la de Hacienda, para “hacer la mayor rebaja fiscal de la historia”, ni a la ministra de Igualdad “para ser una mujer libre que llega al puesto de trabajo sin ser la mujer de nadie”.

“Tampoco a Sánchez, por celebrar unas elecciones a las que se estaba oponiendo”, concluyó.