“Haremos todo lo posible para que Ayuso y Monasterio (Isabel Díaz Ayuso y Rocío Monasterio, candidatas del PP y Vox, respectivamente) no vuelvan a la Puerta del Sol (sede de la Comunidad de Madrid)”, manifestó.

El debate finalizó de forma abrupta al abandonarlo el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, después de que Monasterio no condenara el envío de una amenaza de muerte con cuatro balas dirigidas a él (también a sus padres y a su pareja, la también ministra Irene Montero), así como al ministro del Interior y a la directora general de la Guardia Civil.

“Ha quedado demostrado la forma despreciable de Monasterio y su odio en sus intervenciones y su no condena a las amenazas”, señaló Mónica García.

Dijo que “los españoles somos más los que queremos democracia y otro tipo de acción política no imbuida de odio”, y explicó que “estábamos invitados a debatir” en la Ser, pero Vox “lo ha hecho imposible”.