Migración

La Audiencia de Valencia no ve delito en el suicidio de un interno del CIE en 2019

MADRID
SERVIMEDIA

La Audiencia Provincial de Valencia ha desestimado que haya delito alguno en el suicidio de un joven marroquí del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Valencia en julio de 2019 tras sufrir una paliza de otros compañeros. Sin embargo, aprecia un trato “reprobable” por parte de algunos policías y una asistencia sanitaria “incompleta”.

Según el auto del Juzgado de Instrucción número 10 de Valencia, no existe ningún delito que condujera al suicidio de Marouane Abouobaida, un joven marroquí de 23 años que quitó la vida en el CIE de Zapadores el 15 de julio de 2019 mientras estaba en una celda de aislamiento y tras ser víctima de una brutal agresión a manos de otros internos.

Pese a no observar nada ilegal en el trato y la asistencia al joven migrante, el juez sí aprecia una “asistencia incompleta” en la enfermería del centro, y reprocha al médico y al enfermero que le atendieron que no se preocuparan de que Marouane no hubiera comido en 24 horas tras la agresión y de que no estaba recibiendo el reposo prescrito.

Para el juez, “con tales omisiones se habría incurrido en una asistencia sanitaria incompleta, pero de ninguna manera en una denegación de asistencia sanitaria”. Además, no cree que esto supusiera un “riesgo para la salud del interno ni, menos aún, se ha acreditado que tuviera algún resultado lesivo en su integridad física”.

Tras ser atendido en la enfermería, el joven interno fue trasladado por agentes de la Policía Nacional a una celda de aislamiento en volandas, como registraron las cámaras de seguridad. Según el auto, se hizo porque el interno se negaba a caminar por su propio pie y, de hecho, el médico manifestó que pensaba que el interno estaba “simulando o exagerando”.

"NINGUNA CLASE DE MALTRATO"

Para el juez de instrucción, el hecho de que los policías llevaran en volandas al interno agredido a su celda en volandas y le dejaran en el suelo de la misma y no en la cama “no integran ninguna clase de maltrato o trato degradante, si los funcionarios no han sido advertidos de que el interno, por sus lesiones o su estado físico, no simulaba, no permanecía en el suelo voluntariamente o bien precisaba de una atención especial que no se le daba”.

No obstante, el auto sí reconoce que “es cierto que alguna de las imágenes apreciadas en las cámaras de seguridad puede sugerir un comportamiento reproblable de algún funcionario policial, pero en ningún caso un acto delictivo”.

Como explicó la plataforma ‘CIEs No’, que encabeza la campaña por el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros, “Marouane murió solo en la celda dos horas después de ser aislado” y “tardaron 40 minutos en darse cuenta de que se había quitado la vida”.

La abogada de la plataforma, que asumió la acusación particular en nombre de la madre del joven marroquí, sí aprecia que hubo en la actuación de los agentes “inducción al suicidio, trato degradante, daño a la vida o a la integridad moral”, así como una “denegación de la asistencia sanitaria”.

(SERVIMEDIA)
29 Mar 2021
GIC/nbc