Al menos así consta en el borrador del documento marco para la Conferencia Política del que debe salir el programa electoral, aunque puede haber cambios hasta su aprobación definitiva como propuesta para las elecciones del 20 de noviembre.

En uno de los puntos del documento, se compromete a "revisar el régimen hipotecario con el fin de equilibrar la posición de las partes: garantizando la independencia de las tasadoras, estudiando la dación en pago como forma de liquidación de la deuda".

"Prohibiendo, como forma de publicidad ilegal, aquella que presente las condiciones de los créditos u otras operaciones financieras en distinto relieve o diferentes tipos de letra; estableciendo tipos máximos para los intereses de demora".

Se trata de un paso más en la disposición del PSOE a analizar formas de ayuda a hipotecados, ya que hasta ahora se ha opuesto a las iniciativas que plenteaban directamente la dación en pago, por el impacto que tendría en las entidades y en la concesión de nuevas hipotecas.

El documento habla de revisar la normativa sobre concesión de créditos, especialmente los hipotecarios, para que esta se haga de forma responsable".

"Atenderemos los abusos sufridos por tantas familias como consecuencia de la burbuja inmobiliaria, y que ahora no pueden afrontar el pago de su vivienda a través de un tratamiento integral de la insolvencia del consumidor que tenga en consideración la conducta de buena fe del deudor", añade.

En ese mismo capítulo, el documento incluye la propuesta de un impuesto "sobre el balance de las entidades financieras" para promover la recuperación del empleo.

"Un impuesto que grave los pasivos de las mismas descontando el capital propio, las transacciones intragrupo y los depósitos asegurados" y que se implantaría después de concluir el proceso de reestructuración.