Así lo indicó en declaraciones a los medios de comunicación durante un acto en el Palacio de Cibeles, donde mostró su “profunda alegría” de que los alumnos del instituto de la Comunidad de Madrid “no tuviesen ese adoctrinamiento”.

En este sentido, apuntó que los políticos pueden hacer visitas a los institutos, pero matizó que “otra cosa es que pretendan charlas que fomentan el sectarismo”, donde “tildaría de feministas buenos o malas en función de si compartían sus ideas”. Por ello, destacó que “les viene bien que recibieran las clases que merecían en ese momento”.

Almeida aseguró que Irene Montero defiende unas ideas sobre el feminismo “sectarias, revanchistas y de odio”, por lo que “no procede el adoctrinamiento”, ya que “les iba a decir que a los que no pensasen igual que ella que no eran feministas”.

De este modo, el alcalde insistió en que “está muy bien que no pudiera dar esa charla”, porque auguró que sería “profundamente nociva” para la educación de los alumnos. Así, “es muy beneficioso no escuchar lo que ella predica”, concluyó.