La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (Segg) señala que si bien es verdad que la mayoría de los abuelos están conformes e incluso contentos con esta situación, hay también algunos a quienes no les gusta demasiado.

Aunque es cierto que en la mayor parte de los casos cuidar de los nietos es una actividad que se hace de forma voluntaria y con agrado, "también es verdad que en algunos casos las abuelas y abuelos tienen la sensación de realizar una jornada laboral a tiempo completo y se sienten forzados en unas cargas de cuidados y educación", explicó Alfredo Bohórquez, secretario general de la Segg.

Por eso, sostiene el especialista, cuidar de los nietos debe ser una actividad placentera para abuelo y niño, pero nunca convertirse en una carga para el mayor, que no ha de sentirse sobrepasado por las tareas que tiene que realizar.

Y es que, asegura el doctor Bohórquez, si los abuelos se ven sobrecargados de actividades con los nietos en detrimento de sus propias necesidades, pueden tener, a la larga, problemas de estrés, ansiedad o depresión.

Por ello, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología pide a los padres que sean prudentes a la hora de dejar a los abuelos como canguros.

Igualmente, recuerda que hay que tener presente que hay abuelos cuya máxima aspiración es dedicar su tiempo a cuidar de sus nietos, pero también los hay que desean dedicar el tiempo libre que ahora tienen a disfrutar de aficiones y actividades que no pudieron permitirse cuando eran más jóvenes, "y eso es muy respetable".