Protestas. El Congreso reclama medidas para responder a las demandas del 15-M

MADRID
SERVIMEDIA

El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó esta tarde con la abstención del PP una moción de ERC-IU-ICV enmendada por el PSOE, que reclama medidas para responder a las demandas de los "indignados" movilizados.

Esas propuestas estaban plasmadas en una moción del grupo ERC-IU-ICV a la que el PSOE presentó una enmienda aceptada por Llamazares y que, por tanto, cuenta con respaldo para ser aprobada ante la previsible unión o abstención de otros grupos.

La enmienda del PSOE elimina la mención al 15-M del primer punto y habla de responder a las demandas “de la ciudadanía” abriendo cauces de consulta y diálogo, y arbitrando mecanismos para darles adecuada atención y respuesta, a través, por ejemplo de la Comisión de Peticiones del Congreso y del portal de la Cámara en Internet.

Se mantiene el punto que compromete al Congreso a reforzar en este periodo de sesiones las medidas de transparencia y publicación de bienes, rentas y actividades; régimen de incompatibilidades y dedicación plena al cargo público; y a tomar medidas de austeridad para evitar gastos superfluos, invitando a la Administración a seguir esas mismas pautas.

La enmienda mantiene también el compromiso del Congreso de proceder al nombramiento urgente de los cargos vacantes en las instituciones del Estado, y en primer lugar, de los miembros del Tribunal Constitucional y del Defensor del Pueblo.

El texto original instaba al Gobierno a “reconsiderar” en la Unión Europea el “Pacto del Euro”, y la enmienda aprobada insta a defender “un acuerdo político y social por la recuperación de la economía y del empleo” y “el fortalecimiento del modelo social europeo cuyos principios y valores han de formar parte de la recuperación económica y de la creación de empleo”.

El punto quinto también se modifica, y de pedir medidas que permitan la dación de la vivienda en pago de la totalidad de la deuda hipotecaria, pasa a “atender” las conclusiones de la subcomisión que estudia el asunto, especialmente las que permitan “aliviar el riesgo de ejecución hipotecaria sobre la vivienda familiar en casos extremos”.

El texto aprobado reclama “reforzar” la lucha contra la corrupción con medidas fiscales, administrativas y penales, y a “continuar reforzando” la lucha contra el fraude fiscal, respaldando la creación de una tasa sobre las transacciones financieras internacionales y la supresión de los paraísos fiscales.

También reforzar “la orientación social y redistributiva bajo los principios de que quien más tiene, más paga, y quien contamina, paga”.

El texto aprobado elimina la propuesta original de someter a referéndum vinculante las medidas que requieran amplio debate social, como podría ser la ampliación de la edad de jubilación a los 67 años.

Elimina también la promoción de una reforma electoral “para que todos los votos tengan el mismo peso en escaños, los imputados no puedan ser candidatos y los gobiernos tengan que rendir cuentas del cumplimiento de su programa electoral al final de su mandato”.

En su lugar, el Congreso se compromete a estudiar e impulsar las mejoras y reformas que sean necesarias, teniendo en cuenta, entre otras, las demandas de una mayor proporcionalidad del sistema electoral”.

También el PP y Coalición Canaria habían presentado enmiendas a la moción, que fueron rechazadas por el portavoz de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, durante el debate.

Al defender su iniciativa, Llamazares se mostró “no indignado, sino furioso” por lo que considera un “golpe de los mercados a los estados” europeos, ante el que emplazó a los representantes políticos a “rebelarnos” y a ponerse “del lado de los amotinados que defienden sus derechos y una democracia política de calidad”.

Hay que demostrar, aseguró, que España puede estar viviendo la agonía de la legislatura pero no de la política ni de la democracia representativa, y para ello hay que defender a la democracia de los zarpazos de los especuladores.

El portavoz del PP, Carlos Floriano, aprovechó la defensa de su enmienda para sentenciar que el movimiento del 15-M no se entendería sin la crisis económica y sin “el peor” gobierno posible para gestionarla, el del PSOE.

La solución, en su opinión, es una ley de transparencia como la propuesta por su partido, racionalizar el gasto, y “más políticos caminando por la calle y menos subidos en los coches oficiales”.

El peneuvista Aitor Estéban afirmó que las tensiones en los mercados de deuda que aparentemente están poniendo al euro ante el precipicio pueden provocar que se empiece a ver “una Europa política”, porque la realidad es que “no vemos solución fuera de Europa”.

(SERVIMEDIA)
12 Jul 2011
CLC/jrv