Jáuregui dice que "fuera del euro, España va al infierno"
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El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, advirtió hoy a los llamados "indignados" de que "fuera del euro, Europa desaparece, y fuera de Europa, España va al infierno".
Jáuregui respondía con "la verdad" a las reclamaciones del movimiento 15-M, que llegaban hoy al Pleno del Congreso de la mano de una interpelación defendida por el portavoz de IU, Gaspar Llamazares. El interpelante quería saber qué respuestas estudia el Gobierno para las propuestas planteadas por el movimiento 15-M.
El Gobierno "se siente destinatario" de las quejas de estos ciudadanos, dijo el responsable de Presidencia, pero también recordó que 23 millones de españoles se han pronunciado el mes pasado en elecciones y su decisión tampoco se puede olvidar.
Dicho esto, Jáuregui se mostró a favor de que la política "regule los mercados", como piden los indignados, porque "aceptamos una economía de mercado, no una sociedad de mercado".
Se preguntó: "¿Saben los indignados que este Gobierno ha reclamado la Tasa Tobin?, ¿saben que este Gobierno ha establecido que la remuneración de directivos de entidades que reciben apoyo financiero público tiene que estar limitada?".
Frente a un catálogo de reivindicaciones que "comprendemos y compartimos", el Ejecutivo está haciendo "reformas imprescindibles. (...) Hacemos lo que sinceramente creemos que España necesita", insistió.
Pero sobre todo, pidió Jáuregui, "a los indignados hay que decirles la verdad" y advertirles que "fuera del euro, Europa desaparece; y fuera de Europa, España va a infierno, como Grecia y otros".
"A veces", continuó, "lo mejor es enemigo de lo bueno" y es en este argumento en el que justificó las reformas para preservar a largo plazo el sistema de pensiones o los cambios en el mercado laboral para animar a los empleadores a contratar.
En materia de profundización democrática, el ministro reconoció que los indignados "tienen razón", pero una vez más recurrió a los hechos para alertar de que la reforma de la ley electoral "no es la panacea, arregla unos problemas y crea otros".
Frente a las pancartas que claman "nuestros sueños no estaban en una urna", Jáuregui recordó que "durante años, cuando no había urnas, mi sueño y el de otros era que hubiera urnas. En Egipto y en otros sitios muchos mueren porque haya urnas", dijo en defensa de la democracia repesentativa.
En suma, Jáuregui encontró justas muchas de las aspiraciones del movimiento 15-M y abogó por que sean los partidos de izquierda los que las "encaucen" y les den respuesta, siempre guiados por un criterio de realidad.
Por su parte, el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, acusó al ministro de hacer una "defensa cerrada casi perfecta" de la posición del Gobierno y de haber mandado fuera todos los balones que tenía en su campo de juego.
Desde IU no comparten el diagnóstico del Gobierno y critican con dureza la laxitud de los Estado a la hora de luchar contra los parísos fiscales o de imponer la Tasa Tobin. En cambio, los ajustes impuestos al común de los ciudadanos "son durísmos, inmediatos y se aplican con gran sufrimiento social", apuntó.
Llamazares defendió las reclamaciones de profundización democrática de la calle y se sumó a unas reivindicaciones que deben contemplar también la reforma electoral. Cambios esenciales porque "no queremos que las ratas, en este caso los especuladores, se hagan con la ciudad".
El ministro de la Presidencia señaló que entre él y Llamazares hay una diferencia: "Que yo gobierno y tengo que hacer las reformas, y usted se puede permtir sólo reivindicar sin proponer alternativas".
A la petición del portavoz de IU de "reconsiderar el pacto del euro", Jáuregui respondió que "el sueño de Europa está en riesgo", para acabar alertando: "Hay que salvar el euro y la gobernanza económica aunque implique esfuerzos para todos nosotros".
(SERVIMEDIA)
22 Jun 2011
SGR/gja