La carta, a la que ha tenido acceso Servimedia, explica que “un gran número de trabajadores” a los que representa Fasga se han visto afectados por un ERTE debido a la pandemia. Cita los sectores de programación informática, agencias de publicidad, agencias de viajes, alquiler de coches con conductor, automoción, comercio textil, comercio al por menor, grandes almacenes, seguros y reaseguros o vending, entre otros.

“A pesar de haberse tomado todo tipo de medidas extraordinarias, a efectos fiscales, la gran mayoría de los contribuyentes afectados por un ERTE van a tener un perjuicio de cara a la Declaración de la Renta del ejercicio 2020” debido a que el SEPE “tiene la consideración de pagador a efectos del IRPF”, expone.

Fasga llama la atención sobre que “en la mayoría de los supuestos no se han practicado retenciones de IRPF en la prestación por desempleo por lo que, de cara a la próxima declaración, van a contar con dos pagadores, además de un resultado a pagar”.

Por ello, solicita que el SEPE no sea considerado pagador adicional, dado que “gran parte de los contribuyentes se encuentran en una situación precaria y con grandes problemas económicos, por lo que tener que desembolsar cualquier cantidad al Tesoro Público puede ocasionarles daños que podrían ser irreparables”.