Según explicaron fuentes del banco a Servimedia, Goirigolzarri percibirá una pensión anual que será considerablemente inferior a su sueldo cuando estaba en activo.

A cierre de 2008, el banco había dotado el fondo de pensiones del "número dos" de la entidad con 52 millones de euros. Así, esos 52 millones servirán para hacer frente al pago de esa "nómina".

El año pasado, según los respectivos informes de Gobierno Corporativo del banco, Goirigolzarri cobró 4,6 millones de euros; 4,08 millones en 2007; 3,6 millones en 2006; 3,31 millones en 2005 y 3,08 millones en 2003.

Por otra parte, Goirigolzarri no percibirá los casi 70 millones de euros de indemnización fijados por el banco para aquellos consejeros ejecutivos que se ven forzados a abandonar la entidad.

Según el último informe de Gobierno Corporativo, correspondiente al año 2008, los "consejeros ejecutivos del banco tienen reconocido contractualmente el derecho a percibir una indemnización en el caso del cese por causa que no sea debida a su propia voluntad, jubilación, invalidez o incumplimiento grave de sus funciones".

De acuerdo con los datos, si la salida de Goirigolzarri se hubiese producido en el año 2008, debería haberse embolsado 60,9 millones de euros, mientras que si fuese el presidente le habrían correspondido 80,3 millones de euros.

Como en este caso la decisión de su salida ha sido "de mutuo acuerdo" con la entidad, según explica el propio banco, Goirigolzarri no tendrá derecho en ningún caso a cobrar esta cantidad.