Tomás Pumarola, jefe del servicio de epidemiología del Hospital Universitario Vall d´Hebron, destacó que "no tiene ninguna relación directa con el país sudafricano y se encontró después de la secuenciación completa del genoma", y matizó que entra dentro de la normalidad la introducción de estas cepas en Cataluña por su presencia en países cercanos.

Pumarola subrayó que la presencia de la variante británica en Cataluña se ha localizado principalmente en núcleos urbanos. En concreto, en Barcelona hay un 9% de variante británica, en el Área Metropolitana Sur un 12% y entre un 7 y un 8% en el área Metropolitana Norte.

Argimon, por su parte, insistió en que "según la evidencia de la que disponemos no debemos pensar de ninguna manera que la cepa británica tenga una mayor gravedad clínica" y recordó que "tengamos o no cepa británica debemos mantener las medidas de protección y aislamiento , ya que son las mismas para cualquiera de las variantes ".

Pumarola sí recordó que las nuevas variantes "comparten una mutación que les dan mayor eficacia" a la hora de la transmisión y que por este motivo "estamos monitorizando su evolución de forma muy proactiva".