Gallardón hizo esta afirmación en un acto de campaña en el parque Madrid Río, el proyecto estrella de su última legislatura, también polémico por su coste, y que él reivindicó al inicio de su discurso al celebrar como "un auténtico regalo" tener a su auditorio donde antes sólo había decenas de miles de coches.

El alcalde denunció que el PSOE "quiere devaluar las elecciones" al pedir que en esta campaña no se hable de temas nacionales como el paro, y aseguró que ningún dirigente popular deja de compartir esa apuesta por el empleo abanderada por el presidente nacional, Mariano Rajoy. Gallardón arengó a acabar desde ayuntamientos y comunidades con el "discurso de resignacion y pesimismo" del PSOE.

Según dijo, cabe otra política distinta y es la que ha hecho de Madrid una de las tres primeras ciudades de Europa y diez del mundo; una urbe que, afirmó, los socialistas no comprenden porque si piensan que la nación española es "discutida y discutible" no pueden entender a su capital.

Por último, alertó contra la única alternativa que podría haber al PP en la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, una coalición PSOE-IU cuyo programa sería "un misterio oculto". "No queremos que nos ocurra lo que ocurró en Cataluña y Galicia", aseveró, recordando los gobiernos de coalición en los que entraron ERC y el BNG.