Defensa y Ciencia

Robles y Duque visitan el Centro de Operaciones y Vigilancia Espacial, que alcanzará su capacidad operativa en 2023

Madrid
SERVIMEDIA

La ministra de Defensa, Margarita Robles, y el titular de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, visitaron este lunes el nuevo Centro de Operaciones y Vigilancia Espacial (COVE), sito en la madrileña base aérea de Torrejón de Ardoz, una infraestructura dependiente del Ejército del Aire que vigila el espacio ultraterrestre y alcanzará su capacidad operativa en 2023.

Según informó Defensa, los ministros estuvieron acompañados por la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, y por el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire (Jema), general Javier Salto, entre otras autoridades civiles y militares.

El COVE está adscrito a la jefatura del Sistema de Vigilancia y Control Aeroespacial (Svica) del Mando Aéreo de Combate, y su creación se basa en “la relevancia que ha cobrado el espacio ultraterrestre y la necesidad de vigilarlo, por su alto potencial disruptivo”, trasladó a los presentes el general de brigada Juan Francisco Sanz, jefe de la Svica.

El general Juan Francisco Sanz abundó en que “la importancia del espacio es innegable, tiene un carácter absolutamente transversal, afecta a todos los sectores, desde el económico al ocio, pasando por el transporte y, sobre todo, al de seguridad y defensa”.

Señaló que las amenazas y desafíos procedentes del espacio “se han incrementado sustancialmente”, citando expresamente a los “satélites inspectores”, que pueden aproximarse a otros con la intención de obstaculizar su funcionamiento o sacarles de su propia órbita, aunque también pueden acercarse para solventar problemas.

A su vez, explicó que los desafíos también pueden tener un origen natural o un carácter no intencionado, como en el caso de la basura espacial o las tormentas solares.

El Centro de Operaciones de Vigilancia Espacial (COVE) se integra en el Sistema Nacional de Vigilancia y Seguimiento Espacial y aumenta significativamente la eficacia y eficiencia de los medios disponibles.

A corto y medio plazo, su misión es la vigilancia del espacio ultraterrestre, especialmente en lo que afecta al desarrollo de las operaciones militares de las Fuerzas Armadas. Pero entre sus actividades también se incluye la distribución de predicciones de meteorología espacial y su posible impacto, así como predicciones acerca de la exactitud de las señales de posicionamiento, navegación y tiempo.

A más largo plazo, está previsto que sea capaz de prestar servicios de gestión de tráfico espacial. Asimismo, el COVE tiene importantes ámbitos de cooperación nacional e internacional, con la industria y universidades, la OTAN y la UE, y con EEUU, ya que se requiere un intercambio de conocimientos, adiestramiento y formación que implica mucha cooperación.

La adquisición de todas sus capacidades se alcanzará previsiblemente en junio de 2023, con un equipo de 30 personas altamente cualificadas. La primera fase se completó en junio de 2020 y la segunda finalizará en junio de este año.

(SERVIMEDIA)
01 Feb 2021
MST/gja