Para Marín, esta situación es consecuencia del "tremendo descontrol e irresponsabilidad de Barreda y Araújo, para quienes endeudarse no tiene límites, erigiéndose en los campeones nacionales de emitir deuda pública en esta legislatura".

A través de un comunicado, Marín recordó que Castilla-La Mancha es la región que más ha aumentado su deuda pública en estos dos años de legislatura, un 94%. "Desde que Barreda es presidente (junio 2004) la deuda de la Administración regional ha crecido más que en ninguna otra región, un 208%, 145 puntos más que la media nacional", aseguró.

Marín acusó a Araújo de no saber gestionar los recursos públicos ni negociar en materia de financiación autonómica, y dijo que "al endeudarnos hasta las cejas", está firmando una subida futura de impuestos de 2.185 euros por habitante, ya que es la única forma de pagar la deuda a su vencimiento.

Además, recordó que cada castellano-manchego ya paga mil euros más que cualquier otro español, es decir 4.126 euros, lo que sumado a esos 2.185, hace un total de casi 6.300 euros por habitante, "a pesar de tener menores sueldos (el 68% son mileuristas), menores pensiones y un 6 % más de parados en el último año".

Para Marín, se hace más necesario que nunca "una hoja de ruta valiente" como la que la presidenta de los populares en la región, María Dolores Cospedal, planteó a Barreda en el Debate del Estado de la Región para crear empleo y riqueza en Castilla-La Mancha y abordarla con urgencia.

Para los populares, es necesario rebajar los impuestos en Castilla-La Mancha; emprender acciones para salvar a los autónomos y a las pymes; revitalizar la agricultura y la ganadería; acometer un plan de austeridad y racionalización del sector público; crear empleo ligado a políticas sociales, educativas, sanitarias y de bienestar social y mejorar el acceso a la vivienda y las infraestructuras.