Según informa Greenpeace, que tenía pensado trabajar a 12 millas de la costa, el Gobierno nipón "ha aprobado solamente un programa mucho más limitado en aguas más alejadas".

El "Rainbow Warrior", buque insignia de la organización, llegó este jueves a Tokio en su ruta hacia la central nuclear.

Greenpeace asegura haber presentado al Ministerio de Alimentación y Agricultura nipón "un detallado plan de investigación", que incluye la realización de análisis complementarios a los que realiza el Gobierno japonés.

"Aunque las autoridades niponas han concedido permiso para la toma de muestras de agua del mar, sedimentos y seres vivos marinos, la investigación más importante dentro de la zona de las 12 millas de aguas territoriales ha sido bloqueada", denuncia la ONG.

La tripulación del "Rainbow Warrior" tiene previsto atracar por un corto periodo de tiempo en Tokio para reparar su brújula de giroscopio. Su intención es proseguir después su rumbo hacia la costa de Fukushima.

"Es muy importante que se conceda a Greenpeace permiso para analizar seres vivos marinos y para llevar a cabo la monitorización en las áreas costeras más expuestas a la contaminación radiactiva del agua del mar. Para que la gente pueda proteger su salud y sus propiedades es necesario proporcionarles información independiente y transparente", indicó el director ejecutivo de Greenpeace Japón, Junichi Sato.