En concreto, la misión en Afganistán es la que más bajas militares ha producido, un total de 87, contando las dos de hoy. El elevado número se debe al accidente del helicóptero Cougar hace tres años, que costó la vida a 17 militares, y el accidente del Yakolev-42 que se cobró la vida de 62 soldados en 2003.

En estos momentos, España mantiene en Afganistán un contingente de 778 militares destacados en su mayoría en la Base de Apoyo Avanzado de Herat y en el Equipo de Reconstrucción Provincial Badghis.

La actual rotación del destacamento español está compuesta por efectivos de la Brigada Paracaidista que están siendo relevados por miembros de la Jefatura de Tropas de Montaña.

Además de estos efectivos, hay otros 52, miembros de la Brigada Ligera Aerotransportable (Brilat) con sede en Figueirido (Pontevedra), que pertenecen al grupo OMLT (por sus siglas en inglés) del Ejército español, asentados en "Camp Stone", que se encarga de entrenar al ejército afgano.

Los dos militares fallecidos en el atentado así como los cuatro heridos pertenecían a una de estas patrullas de OMLT que están dedicándose a formar al ejército afgano.

El último atentado terrorista con víctimas del contingente español en Afganistán se registró el 24 de septiembre de 2007 cuando fallecieron dos militares españoles.