Según informó este lunes la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), una borrasca situada en el Atlántico afectará a la península este martes y miércoles, especialmente a la mitad occidental.

Así, en las regiones del oeste se esperan chubascos débiles o moderados ocasionalmente acompañados de tormenta, que podrían ser más intensas en puntos del suroeste.

Las precipitaciones podrían afectar al resto del país de manera más débil y dispersa, y serán poco probables en áreas del cuadrante noreste.

En cuanto a las temperaturas, Meteorología anuncia un ligero a moderado descenso en la mitad occidental, y pocos cambios en el resto.

El viento soplará flojo a moderado en la península y Baleares, de componente este en el área mediterránea con intervalos de fuerte en el Estrecho y litoral de Almería, y de componente sur en el resto.

A partir del Jueves Santo, en la península, Ceuta y Melilla predominará una la atmósfera inestable, asociada a la presencia de una serie de depresiones de origen atlántico. La Aemet prevé que se produzcan chubascos débiles o moderados, a veces con tormenta. Las precipitaciones afectarán prácticamente a todas las regiones en un momento u otro entre el jueves y el lunes, día 25, y podrán dejar cantidades de cierta importancia en áreas del cuadrante suroeste durante el jueves y en zonas del cuadrante nordeste el viernes.

El Domingo de Resurrección y el lunes existe cierta tendencia a que la mayor probabilidad de precipitaciones corresponda al centro y a la mitad oriental peninsular.

Las temperaturas seguirán siendo suaves sin grandes cambios de un día a otro, aunque bajarán en todas las zonas a medida que se extiendan las precipitaciones.

TAMBIÉN LLOVERÁ EN LAS ISLAS

Aunque todos los días habrá posibilidad de registrar precipitaciones en Baleares, los de mayor probabilidad corresponderán al jueves 21 y domingo 24, cuando se espera también que aumente la intensidad de las mismas.

En cuanto a Canarias, predominarán los intervalos nubosos con posibilidad de precipitaciones débiles y dispersas en general, más probables en el norte de las islas de mayor relieve.

Las temperaturas se mantendrán con pocos cambios en ambos archipiélagos.