HUMAN RIGHTS PIDE A EUROPA QUE DESVELE LAS TORTURAS DE LOS CENTROS SECRETOS DE LA CIA

MADRID
SERVIMEDIA

Human Rights Watch (HRW) reclamó hoy a los gobiernos europeos que desvelen el funcionamiento de los centros secretos de la CIA en el continente y se sumen así a la investigación del Ejecutivo estadounidense sobre la "guerra contra el terror" en la etapa de George W. Bush.

El portavoz de HRW, Reed Brody, señaló en un comunicado que los gobiernos europeos "deben revelar el verdadero alcance de la tortura llevada a cabo en sus territorios" y completen el "vacío" del informe del director general de la CIA hecho público el pasado mes de agosto sobre el funcionamiento de los centros secretos de detención de sospechosos de terrorismo en Europa.

Brody recordó que el Parlamento Europeo no sólo confirmó en noviembre de 2006 que los Estados miembros de la UE "tenían conocimiento del programa de entregas extraordinarias y las detenciones secretas", sino que acusó a los servicios de inteligencia italianos de ayudar en los secuestros de la CIA.

Además, la Eurocámara condenó la complicidad del Gobierno sueco en dos entregas de presuntos terroristas a la CIA en 2001 y que el Ejecutivo alemán fue cómplice en otras dos. "Todos estos 'prestados' fueron posteriormente torturados", añadió Brody.

El representante de HRW indicó que el Consejo de Europa comprobó en un informe de 2007 la existencia de centros secretos de tortura de la CIA en Polonia y en Rumanía, y que el pasado verano se supo que Lituania había albergado otro.

Brody subrayó que algunos países de la UE no han colaborado en la rendición de cuentas de estos hechos. Por ejemplo, tribunales de Francia y de Suecia han dejado de lado las denuncias penales, el Tribunal Constitucional italiano falló que debían estar en secreto unas pruebas clave del secuestro de un sospechoso de terrorista y el Gobierno alemán se niega a pedir la extradición de agentes de la CIA.

Además, añadió que España "sólo ha reconocido ahora que, con el Gobierno anterior, la CIA utilizó su espacio aéreo para vuelos de entregas" y otras investigaciones parlamentarias o judiciales no han llegado al fondo de la cuestión en Reino Unido, Rumanía, Polonia y Lituania.

"Deben crearse mecanismos para garantizar que Europa no acoga de nuevo lugares de tortura. Es también importante que Europa rinda cuentas a los que hayan autorizado la tortura. Hasta entonces, la mancha de la tortura se mantendrá en su territorio", concluyó.

(SERVIMEDIA)
24 Sep 2009
MGR/jrv