En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Pérez Rubalcaba confirmó la detención de los hermanos Esnaola, Aitor e Igor, junto a Lander Etxeberría, y la búsqueda de otra persona a la que por el momento no se ha podido localizar, Andoni Goikoetxea.

La Guardia Civil cree que Aitor Esnaola formaba parte del comando, Igor estaría al menos “informado” de sus actividades, y Etxeberría habría servido de correo en alguna ocasión.

Sobre el zulo encontrado en Legorreta, el ministro felicitó a la Guardia Civil por una operación que juzga de las más importantes contra ETA por varios motivos.

En primer lugar, por la cantidad de explosivos que contenía el zulo, más de 1.600 kilos, además de detonadores, ordenadores, pistolas y demás material.

También porque los miembros de ese comando eran legales y, por ello, especialmente difíciles de investigar y rastrear, Y también, y relacionado con su condición de legales, porque fueron captados en 1998 y, en consecuencia, llevaban “muchos años activos”.

Todos esos datos permiten concluir que la última operación contra ETA tiene relevancia porque Legorreta era “la sucursal del aparato logístico” de la banda, su “centro de distribución” en España.

Al concretar la fecha en la que fueron captados, el ministro recordó sus reflexiones sobre la tregua de ese año, mientras gobernaba el PP, y su preocupación para que durante la última tregua no ocurriera lo mismo que en aquella, que fue una reorganización de la banda.