El coordinador de Libertades Públicas del PP, Federico Trillo, señaló en rueda de prensa que "sería una contradicción" que su partido dejara de interesarse sobre el chivatazo en virtud de la colaboración con el PSOE dentro del Pacto Antiterrorista.

Alegó que el soplo de ETA cometido en mayo de 2006, que está bajo investigación judicial en la Audiencia Nacional, está vinculado directamente a la negociación política entre el Gobierno de Zapatero y los terroristas durante la pasada legislatura.

Subrayó que el Pacto Antiterrorista se mantiene en la actualidad "basado en una rectificación" que el Ejecutivo de Zapatero aplicó a la lucha contra ETA al inicio de esta legislatura y que pasaba por seguir una estrategia contraria a la de la negociación.

Negó que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, le haya planteado en alguna ocasión que el PP deje de preguntarle sobre este asunto en el Parlamento. "Yo no lo habría aceptado", apostilló en cualquier caso.

Asimismo, defendió la vigencia del Pacto Antiterrorista y pidió que se siga cumpliendo por las dos partes, ya que considera que la "lealtad" que le exige el PSOE a los populares debe cumplirse con "reciprocidad".

El dirigente del PP defendió la "consistencia" del acuerdo más allá de la confianza que le inspire el representante del Gobierno, en referencia a Alfredo Pérez Rubalcaba.

"El PP se tiene que fiar del Gobierno, que es con quien ha firmado el Pacto, con independencia del juicio personal que nos merezca el interlocutor", dijo. "Nosotros no somos gente de vetos, cosa que ellos sí, como se sabe en otros casos como la renovación del Tribunal Constitucional".

Trillo recordó que los dos grandes partidos suscribieron el acuerdo por escrito en el año 2000 y por eso juzgó que "entrar en digresiones sobre el Pacto y las relaciones personales es perder el tiempo".