El balón sigue siendo el rey del patio

- Según un estudio sobre el juego en la escuela, que echa de menos más toboganes y juguetes en el recreo

MADRID
SERVIMEDIA

El balón sigue siendo el rey del patio durante el recreo, momento en que los niños más pequeños, los de Primaria, juegan al fútbol y las niñas prefieren, en general, desempeñar el papel de una profesora o una madre y hablar entre ellas dentro de un entorno con mucho cemento y pocos columpios que no suele dejarles espacios para actividades como el escondite o el "pilla pilla".

Así lo describió este martes en rueda de prensa Inma Marín, asesora pedagógica del Observatorio del Juego Infantil, creado el pasado mes de febrero para promover el derecho al juego en la sociedad española, donde el aumento de las actividades extraescolares y de las horas ante la televisión y el ordenador están haciendo que padres e hijos jueguen juntos cada vez menos.

Tanto es así que, según esta entidad, el 90% de los padres y el 81% de las madres reconocen que dedican poco tiempo a jugar en familia.

Pero el observatorio quiso centrarse en esta ocasión en el juego en las escuelas y más concretamente en las de Enseñanza Infantil, es decir, en las que educan a niños de entre 6 y 11 años. Para ello, presentó el estudio "La presencia del juego y el juguete como recurso pedagógico en los colegios de Educación Primaria", dirigido por Gonzalo Jover, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid y director del Observatorio del Juego.

El trabajo se realizó entre noviembre y diciembre del año pasado en un total de 523 centros de Primaria, mediante entrevistas "on-line" a unos 15.000 docentes y directores, y evidencia que sólo el 42% de los colegios aluden al juego dentro de sus proyectos y que únicamente un tercio han realizado alguna vez experiencias educativas en las que interviene el juego.

Ya en el patio, durante el recreo, donde los niños pasan 525 horas cada año, el estudio pone de manifiesto que los juegos preferidos por los niños de Primaria siguen siendo, en los tres ciclos, los que requieren de un balón, mientras que los más habituales en las niñas son los de rol.

FALTA DE ESCONDITES

Tanto ellos como ellas juegan cada vez menos al escondite o al "pilla pilla" por "falta de sitio" y no patinan o lanzan la peonza tampoco demasiado a menudo porque lo tienen prohibido en muchos colegios, señaló la asesora pedagógica, para quien los patios de recreo actuales "causan una relativa decepción".

Y es que, afirmó, las normativas escolares no hablan de las características necesarias que han de cumplir estos espacios de esparcimiento, que presentan una "morfología pobre" y tienen "pocos elementos de juego (columpios o toboganes) y mal mantenidos".

Además, aseguró, en los patios escolares "imperan las prohibiciones (no llevar juguetes de casa) y faltan elementos que motiven el juego".

Para variar un poco este panorama, la asesora pedagógica sugiere "pasar de la prohibición al estímulo, del cemento a los toboganes y de la inhibición a la intervención educativa", porque echa de menos la presencia de los adultos en el recreo, donde, dice, no tienen por qué intervenir de una forma siempre activa, pero sí estar ahí para "aplaudir" en el momento adecuado o para aconsejar.

(SERVIMEDIA)
05 Abr 2011
IGA/caa