Iglesias compareció en rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, a la que asistió el secretario general y presidente del Gobierno, después de su anuncio del pasado sábado.

Los socialistas, aseguró, están “muy satisfechos” de que el secretario general pudiera anunciar su decisión donde correspondía, en el máximo órgano de dirección entre congresos, el Comité Federal, y también de ver “la madurez” y “la serenidad” compatible con “el cariño” en la reacción de los militantes a lo largo del fin de semana.

Iglesias elogió especialmente “la naturalidad, el poco dramatismo” con el que Rodríguez Zapatero comunicó su decisión y su intención de seguir gobernando “con toda la energía, toda la autoridad, y el apoyo del partido hasta el último día” de la legislatura.

En los 620 actos que el PSOE celebró el fin de semana por toda España se pudo ver, subrayó, la actitud “madura, de serenidad y de mucho afecto, de simpatía, de comprensión” de los militantes hacia el secretario general.

CENTRADOS EN LA CAMPAÑA ELECTORAL

Con todo ello, la conclusión es que los socialistas “estamos aprovechando bien” lo que Rodríguez Zapatero anunció el sábado “para entrar en una situación distinta. Volvemos a estar en el centro del tablero de juego, en muy buena posición” para afrontar las elecciones de mayo.

“Despejada la mayor”, dicen en la dirección del PSOE, todo el partido puede centrarse en esa campaña electoral con ánimo de “ganar esa batalla” y con expectativas de obtener “un muy buen resultado”.

El PSOE hará su campaña con la idea de que los pilares del Estado del bienestar dependen en buena medida de la gestión de las comunidades autónomas y de los municipios, por lo que “no es lo mismo una política que otra, que gane la derecha o el PSOE”.

Además, tras el anuncio del presidente, al PP “ya no le vale” el argumento de que todo es culpa de Rodríguez Zapatero, y sus candidatos y sus dirigentes “tendrán que dedicarse a hacer propuestas a los ciudadanos”.

El PSOE confía en que el anuncio le permita centrarse en la campaña y dejar el debate sobre las primarias “para el verano, como las bicicletas”, dejando claro que aplazarlo hasta entonces no significa que quiera rehuir ese asunto porque, muy al contrario, “nos interesa mucho dejar claras las diferentes fórmulas de elegir a los candidatos”.

RUBALCABA Y CHACÓN

Los dos que se postulan como posibles aspirantes en esas primarias, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, no hablaron en la reunión de la Ejecutiva, y Marcelino Iglesias enmarcó los gritos de “presidente” y “presidenta” con los que fueron acogidos en sus mítines del fin de semana como muestra del afecto de los militantes, sin más interpretación.

Al otro gran protagonista, al propio Rodríguez Zapatero, le vio “muy bien, en plena forma” después de haber hecho pública su decisión, y “andando perfectamente”, nada de “pato cojo”, como dicen algunos.

“No ha pasado a ser un hombre del pasado, es un hombre del presente y de futuro, con ánimo extraordinario para dirigir el país” y seguir tomando las medidas necesarias para sacarlo de la crisis económica. Lo peor para él, aseguró, fue tomar las decisiones posteriores a “la tragedia griega”.

Marcelino Iglesias pidió expresamente disculpas a los medios de comunicación por su intento de “despistar” sobre lo que iba a ocurrir en el Comité Federal del pasado sábado, porque fue “el trabajo que me tocó hacer” para garantizar que Rodríguez Zapatero podía anunciar su decisión donde quería y donde debía hacerlo, ante el Comité Federal, sin que estuviera ya “descontado”.

Puesto que su único anuncio es que no volverá a ser candidato, pero tiene intención de agotar la legislatura y de seguir ejerciendo como secretario general, Iglesias dio por hecho que el congreso para elegir una nueva dirección será “cuando toca”, es decir, después de las generales de 2012.