En concreto, las actividades inmobiliarias contaban a finales de 2010 con préstamos por importe de 315.781 millones de euros, de los que 44.137 millones eran considerados dudosos.

La rama inmobiliaria copa el 32% del total del crédito concedido por las entidades financieras a los sectores residentes para financiar actividades productivas, que asciende a 985.151 millones.

Además, se si tiene en cuenta el total de préstamos dudosos en la financiación de actividades productivas (79.710 millones), el 55% del mismo recae sobre las inmobiliarias.

En cuanto a los préstamos para la adquisición y rehabilitación de viviendas, de los 662.797 millones de créditos, el 2,43% son dudosos (16.151 millones).

Si se atiende sólo a la compra de viviendas, la morosidad se sitúo en el 2,42%, al existir 15.329 millones de euros de dudosos sobre un total de crédito de 632.448 millones.

En comparación con el año anterior, la morosidad en la adquisición de pisos muestra una caída, ya que cerró 2009 en el 2,86%.