En el mensaje de Nochebuena
Los obispos piden a los políticos que sirvan al "bien común" para atenuar la crisis social provocada por la pandemia
- En el mensaje de Nochebuena del presidente de la Conferencia Episcopal
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, llamó a los políticos a poner "los medios necesarios" para superar la crisis provocada por la pandemia "con vocación de servicio al bien común".
Así lo destacó en el mensaje que emitió anoche Trece TV después del discurso de Navidad del Rey. Según informó la CEE, Omella grabó sus palabras en la capilla de la Sucesión Apostólica de la sede del Episcopado en Madrid, junto a la imagen de un Niño Jesús y una vela encendida.
"Sería bueno, cuánto lo deseamos todos, que los responsables políticos y las instituciones públicas y privadas pongan los medios necesarios para que esta nueva crisis social y económica pase cuanto antes. En eso se concreta ahora su vocación de servicio al bien común, sin el cual no existe una verdadera caridad política", dijo.
"A las personas de buena voluntad os animo a construir una fraternidad abierta, que permita reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite", apeló, en línea con el Papa, que propone la "fraternidad humana" como modo de relación universal.
"Todos estamos llamados a crear una familiaridad por encima de razas, de procedencias, de nivel social, de convicciones personales o religiosas. Eso tiene vertientes en la política, en la economía, en las relaciones internacionales… aunque quizá eso, a muchos, se nos escapa", subrayó durante un mensaje que se prolongó durante algo menos de nueve minutos y que concluyó felicitando la Navidad en euskera, catalán, gallego y castellano.
LA DUREZA DE LA PANDEMIA
"Seguramente, mirando a nuestro alrededor, en este momento, nos damos cuenta de la dureza de lo que nos ha pasado", reflexionó, apuntando a las ausencias en las celebraciones de estas fechas y que "en muchas familias, en demasiadas, sienten la ausencia de familiares y amigos que se han ido para siempre". "Son momentos de dolor ante el que no podemos ser indiferentes", lamentó, subrayando también que se "anuncian" en muchos hogares "dificultades económicas graves y el futuro se presenta sombrío".
Ante ese panorama, apeló a los católicos "a estirarse hasta el último hogar para llevar compañía, consuelo y ayuda".
En el discurso, Omella también quiso aplaudir la labor de quienes han contribuido a la lucha contra el Covid-19 y que en su opinión han brillado como "luches que han permitido mantener la esperanza" y enumeró a sanitarios, médicos, sacerdotes en los hospitales, militares en las residencias de ancianos, responsables de logística, de limpieza, de los servicios básicos, trabajadores en los supermercados y en los colegios, personas anónimas e instituciones sociales.
ENSEÑANZAS
Asimismo, durante su alocución, el prelado recordó que el nacimiento de Jesús que se conmemora en Nochebuena "deja algunas enseñanzas que nos pueden ayudar en este tiempo", como "la importancia de la humildad" de Dios que nace en la pobreza en un portal. "¿No deberíamos aprender a hacernos pequeños? ¿No deberíamos ponernos a la altura de los más pequeños?", preguntó el arzobispo de Barcelona.
La otra enseñanza es "el ejemplo de José": "Él tampoco pudo celebrar esa Navidad ni donde quería, ni seguramente con quienes quería. Las gentes del lugar no les pudieron acoger o no quisieron acogerlos. Pensaban que, con ellos, no cabrían todos y dejaron fuera lo mejor, a los más necesitados. Esa familia llegada de fuera, como ocurre tantas veces, eran una bendición, una riqueza y un nuevo don para esa sociedad. Dejándolos fuera, se perdieron lo mejor. Que no nos eso pase a nosotros".
En tercer lugar, el obispo se fija en la figura de los pastores, "hombres sencillos" que compartieron con el que no tiene nada, valores, según el presidente de la CEE "tan necesarios en nuestro tiempo, aquí y ahora" porque "estamos celebrando la Nochebuena de un año muy duro" por la pandemia del Covid-19.
(SERVIMEDIA)
25 Dic 2020
AHP/gja