Marlaska se pronunció sobre este asunto en una entrevista en Onda Cero recogida por Servimedia, donde valoró que la portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, dijera este martes que PSOE y Podemos retomarán la reforma del sistema de elección de parte de los vocales del CGPJ si la formación de Pablo Casado no acepta pactar la renovación en un “tiempo razonable”.

En este sentido, el titular de Interior, que es juez en excedencia, acusó al PP de estar usando al órgano de gobierno de los jueces como “rehén” en la “trinchera partidista”. Indicó que la negativa del primer partido de la oposición a renovar esta institución es un “bloqueo” que puede ser definido como “aconstitucional, ya que el actual Consejo lleva en funciones desde diciembre de 2018.

El ministro censuró que en los últimos dos años, cuando se estaba a punto de cerrar un acuerdo para elegir a los nuevos vocales, el partido de Casado esgrimiera argumentos “muy tristes” para no completar el pacto, como el cese de Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz de los populares en el Congreso o la proximidad de las elecciones catalanas.

NO CREAR “ALARMA”

Al mismo tiempo, Marlaska pidió no crear “alarma” si, ante una insistencia del PP a no renovar ya el Consejo, PSOE y Podemos vuelven a impulsar la reforma legal que plantea que los 12 vocales de extracción judicial sean elegidos por mayoría absoluta en las Cortes si no es posible reunir los tres quintos en el Congreso y el Senado.

El responsable de Interior señaló que, en caso de tener que impulsar esta reforma, nadie debe dudar de que “va a ser conforme a la Constitución y a los principios que en materia de independencia judicial vienen exigidos tanto en la Unión Europea como en el Consejo de Europa”.

Además, se refirió a que, aunque los 12 vocales de extracción judicial fuesen elegidos por mayoría absoluta y no por tres quintos en las Cortes, hay que tener en cuenta que estos candidatos serían propuestos en una lista por los propios magistrados. Sostuvo que esto supondría que los futuros miembros del CGPJ habrían pasado el “filtro de sus compañeros”, aunque después serian los partidos los que confirmarían su elección.