Así lo anunció este martes la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, durante su participación en el ‘I Congreso Internacional Digital de Directivos’ organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD).

“Frente a los 130.000 millones -de emisión neta- adicionales vinculados a la crisis sanitaria que anunciamos en primavera, la gestión presupuestaria y una mejor evolución de la recaudación tributaria de la que teníamos en aquel momento van a permitir reducir esa cifra a los 110.000 millones”, explicó.

Calviño detalló que, en la práctica, significa que el Tesoro cancelará la última subasta de Bonos y Obligaciones programada este año de las dos que iban a tener lugar en diciembre, y no celebrará la programada el día 17.

La ministra explicó que es una noticia “importante”, sobre todo, “desde el punto de vista de justicia intergeneracional ya que esta deuda pública, que representa un esfuerzo colectivo de la sociedad española, tendrá que ser asumida en buena parte por las generaciones más jóvenes de nuestro país”.

“Y por eso -añadió- tenemos que asegurarnos que estos recursos se destinan a inversiones y reformas que realmente mejoren sus oportunidades de futuro desde el punto de vista profesional y también desde el punto de vista personal”.

Para que este “esfuerzo, imprescindible en este momento, también tenga su recompensa en el futuro”, refirió que el Gobierno ha diseñado el plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, “orientado al futuro” y “levantando la vista de los problemas del ahora” para diseñar el futuro del país.

Es una guía de inversiones, proyectos y reformas estructurales para avanzar en la economía verde, digital, la cohesión social y territorial, que prevé lanzar el Gobierno a partir del 1 de enero de 2021 “si se aprueban, como espero los Presupuestos” y con independencia de cuando se aprueben los textos y se produzcan las ratificaciones definitivas para que empiecen a fluir los recursos procedentes de los fondos europeos.

La ministra recordó que los Presupuestos para 2021 cuentan con acometer 39.000 millones de euros en inversiones, 27.000 millones de ellos asociados a los fondos europeos con los que se pondrán en marcha proyectos transformadores y donde la colaboración público-privada va a ser “fundamental”.

Con el plan de transformación previsto apuntó que se conseguirá situar el crecimiento potencial de España “por encima del 2%”, con un efecto estimado ya en el 2021 de “entre dos y tres puntos porcentuales”.

El Tesoro irá acomodando su programa de deuda en 2021 a las necesidades, como también ha hecho este año, pero cerrará con una rebaja en las colocaciones de 20.000 millones sobre su previsión de hace apenas un mes.

La rebaja ha sido posible gracias a una evolución de los ingresos más favorable que la prevista a principios de octubre ante la recuperación de la actividad económica a partir del tercer trimestre, y a que han continuado las amortizaciones anticipadas por parte de las comunidades autónomas de préstamos de los Fondos de Financiación.

La nueva reducción se considera un reflejo del buen comportamiento mostrado por la economía española en los últimos meses y de la buena gestión y prudencia del Tesoro a la hora de realizar sus estimaciones y ejecutar el programa de financiación.

En la rebaja total de 20.000 millones también ha influido que se espera que vengan a España 10.000 millones de euros del fondo SURE creado para hacer frente a los gastos públicos generados en materia de empleo por la pandemia, de los que 6.000 millones ya se han recibido. La partida total ascenderá a 21.300 millones, de forma que en 2021 deberían llegar otros 11.300 millones, a sumar a los 27.000 millones previstos del fondo de la UE Next Generation.