Senado
Iglesias niega haber ocultado contratos: “No pueden acusarme de parecer un dirigente del PP”
- "Acúsenme mejor de haber quemado el Reichstag", retó en alusión a la célebre e inverosímil acusación de Hitler a un comunista sobre el incendio de 1933
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El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, negó este martes haber ocultado del escrutinio público 26 contratos firmados por su Vicepresidencia para mitigar los efectos del coronavirus durante el estado de alarma de primavera y tras hacerlo bromeó: "Me pueden acusar de muchas cosas, pero de parecer un dirigente del PP no me pueden acusar. Acúsenme mejor de haber quemado el Reichstag"
Iglesias sacó así a colación la histórica acusación del partido nazi a un comunista de haber quemado el Parlamento alemán en 1933 y que sirvió al ya canciller Adolf Hitler para restringir libertades políticas, y lo hizo en respuesta a una pregunta que le formuló en la sesión de control al Gobierno la senadora del PP María Teresa Ruiz-Sillero.
La parlamentaria introdujo una nueva pregunta al hilo de una información publicada ayer en 'El Mundo', e inquirió al vicepresidente cómo justifica que "26 contratos adjudicados para hacer frente al coronavirus durante el estado de alarma no se hayan publicado en la plataforma de contratación del Sector Público ocultando el importe y la empresa adjudicataria".
Ruiz-Sillero adornó la pregunta poniendo los “líos con los contratos de la Vicepresidencia” como último capítulo tras “los líos con el teléfono de la asesora Dina (Bousselham), los “líos con el dinero” de la financiación de Podemos y de la expulsión de la parlamentaria andaluza Teresa Rodríguez del grupo parlamentario que compartía con este partido e IU en la cámara autonómica.
Asegurando que la Vicepresidencia le respondió inicialmente que esos contratos no estaban publicados (algo que Iglesias escuchó diciendo que no con la cabeza), le espetó que la Ley de Contratos del Estado y la Ley de Transparencia obligan a ello y terminó retándole: “Tiene una segunda oportunidad: ¿Por qué ha ocultado esos contratos y no se han publicado”.
El vicepresidente contestó con una breve y rotunda frase: “Lo que usted afirma en su pregunta es mentira”. A lo que su interlocutora protestó y pronosticó: “Estamos acostumbrados a esas salidas de tono y ahora en su segundo turno pondrá voz de sermón y tirará de manual”.
Prosiguió que “podía haber pedido perdón y decir que los iba a publicar (los contratos)” y terminó desafiándole a “hacer una auditoría de todos los contratos” que ha hecho como vicepresidente “para certificar que todos se han adjudicado correctamente”. Además, concluyó su intervención afeando a Iglesias que no haya visitado ninguno de los centros de mayores o dependientes que están bajo su organigrama y sentenció que “es vicapresidente sólo de nombre porque no se preocupa por las personas”.
Iglesias comenzó su réplica con dulzura: “Se lo digo con todo el cariño y sin acritud. Los contratos menores y los de emergencia del Injuve y el Imserso no solamente han cumplido todas las exigencias de transparencia, sino que han ofrecido más información de la que se requiere legalmente”.
Pero en seguida dio la vuelta al tono retórico para acusar a la “derecha política y mediática” de haber “normalizado la mentira” y “asumido que mentir es legítimo políticamente”. Enumeró algunas de las que supuestamente él ha sufrido en materia de financiación o cuentas ocultas y lanzó la hipérbole: “Lo próximo que vamos a ver en esos periódicos es que los comunistas, en efecto, quemaron el Reichstag”. Finalmente, sentenció a modo de búmeran contra su interlocutora: “Me pueden acusar de muchas cosas, pero de parecer un dirigente del PP no me pueden acusar. Acúsenme mejor de haber quemado el Reichstag”.
(SERVIMEDIA)
03 Nov 2020
KRT/mjg