Así se expresó el presidente del Cermi, Luis Cayo Pérez Bueno, durante su intervención en el Foro Emprender para la Discapacidad, organizado por la Fundación Incyde de la Cámara de Comercio de España y RTVE, en el que mantuvo un coloquio con la periodista con discapacidad y activista Vicky Bendito.

“El emprendimiento económico en el ámbito de los grupos sociales en riesgo de exclusión, como el de las personas con discapacidad, ha de ser una opción, voluntaria y deseada, consciente y querida, no una imposición, como ocurre tantas veces”, enfatizó Pérez Bueno.

En su opinión, no hay emprendimiento saludable cuando este se convierte en una obligación, en tanto que el mercado, las empresas, no dan oportunidades a las personas con discapacidad y por la vía de los hechos se las fuerza a emprender, con apenas apoyos, por tener vedadas otras alternativas”.

El presidente del Cermi insistió en la idea de que “la diversidad humana que representan las mujeres y hombres con discapacidad, que hay que considerar un valor, tiene una proyección también positiva en la actividad económica, que puede aportar elementos de mejora a una economía inclusiva, con rostro humano”.

Para las personas con discapacidad, según el dirigente del Cermi, el emprendimiento es una forma de empoderamiento económico, que sienta las bases para una autonomía personal sólida y sostenible, de una vida independiente.

Por último, llamó la atención sobre el emprendimiento colectivo en el ámbito de la discapacidad. “Además de un emprendimiento personal, en el mundo de la discapacidad hay un emprendimiento grupal, de organizaciones y entidades cívicas, que es la vanguardia y la fuerza tractorara de la inclusión laboral de las personas con discapacidad”, zanjó Pérez Bueno.