Coronavirus
El PP pide al Gobierno que se avenga a reformar la ley sanitaria para evitar recurrir a la “excepcionalidad” del estado de alarma
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La vicesecretaria de Política Social del PP, Ana Pastor, reclamó este martes al Gobierno que acepte reformar la Ley Orgánica de Medidas Especiales de Salud Pública de 1986 para evitar tener que recurrir a la “excepcionalidad” del estado de alarma para hacer frente a la pandemia del coronavirus.
Lo dijo durante su intervención en el comité de seguimiento del Covid-19 del PP convocado por el presidente del partido, Pablo Casado, para analizar el impacto de la pandemia.
La intervención de Pastor estuvo centrada en el decreto del estado de alarma aprobado el domingo por el Gobierno cuya prórroga se podría extender seis meses, ante el cual Casado ha condicionado su apoyo a que su duración se limite a ocho semanas.
La vicesecretaria de Política Social del PP constató que “el Gobierno ha vuelto a fracasar en la gestión de la pandemia y nos ha abocado a la excepcionalidad a través de la declaración de un nuevo estado de alarma”.
Este aserto le sirvió de preámbulo para enumerar los fallos que, a su juicio, el Ejecutivo ha cometido durante la gestión de la pandemia: su tardanza a la hora de tomar medidas “hasta que el virus estuvo en cada casa”, “no hacer acopio de material de protección”, rectificar su renuencia a recomendar el uso de las mascarillas, proclamar la derrota del virus e “irse de vacaciones” en verano.
Ahora, continuó Pastor, declara el estado de alarma “tras dejar a su suerte a las comunidades” autónomas. “Vuelve a fallar si piensa que los españoles aprueban su gestión”, dijo.
Ante las dudas de los españoles referidas a “por qué estamos en esta situación y quién la ha provocado”, prescribió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que salga a “pedir perdón por sus errores y ser humilde”.
También le recomendó que escuche a Casado cuando le propone reformar la Ley Orgánica de Medidas Especiales de Salud Pública de 1986 con el fin de homologar a España al resto de países comunitarios que “están luchando con una ley ordinaria contra la pandemia”.
Al mismo tiempo, aseveró que “no hay ningún jurista que defienda un estado de alarma de seis meses”, lo que le sirvió para reiterar el ofrecimiento hecho ayer por Casado para supeditar el apoyo del PP al mismo a limitarlo en el tiempo ocho semanas.
Ello permitiría limitar la movilidad de los ciudadanos en los tres puentes que hay en noviembre y diciembre -Todos los Santos, La Almudena y Constitución-, “llegar a Navidad con una cierta normalidad” y trasladar un “mensaje a nuestros mayores de que no van a estar solos” durante las fiestas navideñas.
Durante las ocho semanas en las que estaría en vigor el estado de alarma, dijo Pastor, se podría reformar la Ley Orgánica de Medidas Especiales de Salud Pública de 1986 con el fin de que las comunidades autónomas cuenten con instrumentos jurídicos propios para poner en marcha medidas restrictivas que no pasen por el estado de alarma ni dependan del visto bueno de los jueces.
“El Gobierno solamente sabe actuar desde los extremos: o te confina o te manda de vacaciones. Hay una oposición leal a este país y a los españoles, por lo que le reclamamos humildad, porque el PP ha presentado una alternativa para luchar contra la pandemia”, proclamó.
A su vez, Pastor reflexionó sobre la importancia de incrementar el control en los aeropuertos, aumentar el número de test y vacunar contra el neumococo y la gripe a sectores de la población considerados de riesgo. “Esto es prevenir”, exclamó.
Tras denunciar que “no se ha reforzado la Atención Primaria”, aprovechó la huelga de médicos para aducir que “no hay un solo” profesional sanitario que esté de acuerdo con el real decreto que permite la contratación de recién licenciados, sin que hayan cursado la especialidad ni aprobado el MIR.
Pastor también lanzó un sucinto pero directo ataque a Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes), al afirmar que “en una pandemia tiene que haber un referente científico creíble, creo que se me entiende. España necesita mirar a un científico, a un técnico creíble, que los españoles cuando le vean confíen en él”.
Por ello, propugnó que “la confianza se pierde cuando nos toman el pelo o nos dicen que una cosa es blanca cuando en realidad es negra”.
Por último, reflexionó sobre el respeto a las instituciones al apuntar que “un Gobierno no puede avasallar, pasar la aspiradora. Un Gobierno está siempre sometido al Parlamento, que representar la soberanía nacional. No le va a pasar nada por escuchar a la oposición”.
“La razón no está en una persona por mucho foco que tenga, sino en escuchar a los españoles”, concluyó.
(SERVIMEDIA)
27 Oct 2020
MST/mjg