Según informó la Policía, la operación se saldó con la liberación de seis mujeres y el registro de tres pisos en la provincia de Albacete –dos en la ciudad de Albacete, donde se produjeron las cuatro detenciones, y uno en la localidad de La Roda-, en los que se intervinieron 3.530 euros y 1.250 dólares en metálico, 20 teléfonos móviles, una balanza de precisión y diversa documentación relacionada con los hechos investigados.

La investigación comenzó a partir de una comunicación recibida desde Interpol Caracas que advertía, a partir de una denuncia presentada ante las autoridades venezolanas, de la existencia de una organización asentada en España que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres del país caribeño.

Las pesquisas de los agentes corroboraron los pormenores de la denuncia y comprobaron que las mujeres eran sometidas a un “duro control, con un régimen severo de multas económicas si desobedecían las directrices establecidas, y eran forzadas a estar disponibles durante las 24 horas del día, incluso durante la primera fase de confinamiento general derivado del estado de alarma establecido por las autoridades gubernativas”.

La organización ofrecía los servicios sexuales mediante anuncios en Internet con imágenes reales de las mujeres. Las citas con los clientes eran concertadas telefónicamente por miembros del clan –las conocidas como “mamis”-, y con el dinero obtenido las mujeres tenían que afrontar el pago del porcentaje que le correspondía a la organización, los gastos de alojamiento y manutención y la deuda por el viaje, que ascendía a más de 4.000 euros.

Los agentes constataron que el clan también se beneficiaba con la venta de droga a los clientes que acudían a los pisos y con el uso de tarjetas de crédito clonadas o sustraídas para la compra de los billetes de avión con los que viajaban las mujeres desde Venezuela.

La Policía Nacional explicó que esta operación se enmarca en su plan contra la trata de personas con fines de explotación sexual, dentro del cual dispone de la línea telefónica 900 10 50 90 y del correo electrónico ‘trata@policia.es’, para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos, no quedando reflejada la llamada en la factura telefónica.