“Ya contábamos con ellas”, trasladaron fuentes gubernamentales y socialistas a Servimedia después de las críticas que ha recibido la proposición de ley que el PSOE y Podemos registraron en el Congreso para sortear la renovación del órgano de gobierno de los jueces que, denuncian, “bloquea” el Partido Popular.

En esta línea, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, defendió la propuesta para la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial y, en una conversación informal con periodistas, recordó que el único organismo que se da sus normas de elección es el Parlamento.

Insistió en que las “únicas mayorías” que hay que respetar son las establecidas en la Constitución y que las demás no son más que el fruto del trabajo legislativo. Así, defendió que el Congreso representa el resultado de las urnas y esa mayoría es la que debe trasladarse.

La ‘número dos’ de Pedro Sánchez en La Moncloa denunció que en el PP se han negado a pactar la renovación y que la reforma impulsada no es una idea presentada de urgencia, porque sobre esta cuestión llevan meses de debate.

Por su parte, fuentes de la dirección del PP consultadas por Servimedia instaron al jefe del Ejecutivo a “leer a los jueces y fiscales hoy, también a los europeos”. Como seña del rechazo a la reforma impulsada por PSOE y Podemos, desde el PP animan a ver estas críticas de los jueces, que no han tardado en cuestionar la legalidad de la iniciativa.

Además, desde Génova aseguran que “ahí estará” su formación si en el Gobierno realmente “quieren volver a la despolitización”. Eso sí, volvieron a recalcar su exigencia de que Podemos no tenga nada que ver en “la ecuación”.

La sesión de control al Ejecutivo de este miércoles se inició con el líder de la oposición, Pablo Casado, preguntando a Sánchez por las razones que le llevan a “amenazar a toda España” con una reforma para renovar el CGPJ “a la polaca”. Así, le urgió a retirar este “atropello legal”.

Es más, Casado avisó a Sánchez de que mientras no rectifique “no hay nada que pactar” en este ámbito con el PP. “A mí no me presiona nadie y menos alguien como usted”, le advirtió seguidamente. “Hasta que no rectifique, acudiremos al Tribunal Constitucional y a las instituciones y tribunales europeos, así que no ponga en riesgo los fondos de reconstrucción por atacar nuestro Estado de Derecho”, prosiguió.

En este tenso ‘cara a cara’, el jefe del Ejecutivo estimó que el PP “ha dejado de ser un partido de Estado” y ahora es una formación “antisistema” que “no cumple con la Constitución”.