Así lo propuso el presidente del Cermi, Luis Cayo Pérez Bueno, en la reunión del Consejo Consultivo para la Transformación Digital, constituido hoy con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El Cermi, elegido por el Gobierno para formar parte de este nuevo órgano, en representación de la discapacidad organizada, saludó la constitución de este Consejo, “como foro promotor e irradiador de alianzas por la transformación digital, y por la consideración y consiguiente invitación al movimiento social de las personas con discapacidad”.

Según su presidente, “el Cermi quiere ser parte de una gobernanza digital inclusiva, para lo cual, desde esta parte de la diversidad humana y social, ponemos el énfasis en que la transformación digital no es solo, no es ni siquiera principalmente tecnológica, económica, empresarial, sino sobre y ante todo social”. En su opinión, “ha de tener un rostro humano”.

Según indicó, “lo digital ha de ser accesible y asequible y comprensible y usable, sin castigo para quienes somos diferentes, funcionamos corporal, cognitiva, comunicacional o mentalmente de modo diferente al usual, al más extendido, al tenido como canónico”. Por ello, concluyó que “la digitalización es un motor de inclusión, nunca de exclusión y fractura; y la discapacidad se conecta con este noble fin”.