De ello informó este martes en el Congreso el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, quien compareció en la Comisión de Interior para a explicar cómo está actuando este Ministerio con el Gobierno de Pedro Sánchez.

En materia migratoria, Pérez explicó que “las entradas totales de inmigración irregular en Ceuta y Melilla continúan también registrando una tendencia decreciente a lo largo de 2020, en comparación con los datos del año pasado”.

Así, el total de las entradas en Ceuta y Melilla se han reducido un 63,8% en lo que va de este año (1.608 entradas en 2020 frente a 4.440 en 2019). Las entradas por vía terrestre en ambas ciudades han descendido un 61,9% (2.350 entradas menos). En Ceuta, se han reducido las entradas por vía marítima (un 53,7%, 180 entrada menos).

RETIRADA DE CONCERTINAS

El 'número dos' de Interior se refirió a que, por lo que se refiere al conjunto de España, a lo largo del año 2019 se logró reducir a la mitad el número de llegadas irregulares y, en lo que va de 2020, se ha conseguido una reducción del 26% en relación al mismo período del año anterior.

Al mismo tiempo, Pérez indicó que se ha reforzado el vallado fronterizo de Ceuta y Melilla y se están retirando las “peligrosas concertinas”, algo que dijo se está haciendo sin problemas. Señaló que paralelamente se están impulsando medidas tecnológicas de control.

Respecto a la inmigración ilegal en Canarias, el secretario de Estado aludió a que en el caso de esta comunidad autónoma se registra un aumento de las llegadas irregulares, aunque esta tendencia “debe ponerse en relación con las cifras globales registradas en la totalidad del territorio”.

Explicó que “no cabe duda de que las mafias y redes de inmigración irregular van adaptando y modificando su 'modus operandi', buscando rutas y modos de actuación alternativos, en función del contexto, en el que el mayor control en unas rutas migratorias, como la del Mediterráneo Occidental, conlleva la reapertura de otras rutas”.