De hecho, afirmó en rueda de prensa, “he estado hablando con la ministra, Trinidad Jiménez, cada dos horas”. “Han estado colaborando en todo el problema. Pero son humanos. Y hay que entender que, si uno tiene problemas, también los gobiernos tienen problemas. No es que los tenga España, es que los tiene el mundo”, dijo.

A su juicio, la compañía está consiguiendo traer a España a sus trabajadores “por estar calladitos”, es decir, por hacer gala de prudencia.

En otro orden de cosas, Brufau valoró la inversión de los activos de la petrolera española en Libia en 650 millones de dólares, aproximadamente.

Descartó que vayan a producirse problemas de desabastecimiento (dado el alto grado de diversificación del sistema), pero no que suba el precio del crudo más aún.