Investigación

Un proyecto para reactivar el sistema inmune en melanoma, financiado por Fundación "la Caixa"

MADRID
SERVIMEDIA

Un proyecto liderado por el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) para reactivar el sistema inmune en melanoma acaba de recibir una financiación de 500.000 euros en la Convocatoria de Investigación en Salud de la Fundación “la Caixa”, para identificar nuevos genes responsables de la progresión de este tumor de piel para entender su capacidad de metástasis.

Según informó este martes el CNIO, este proyecto se enfoca en los mecanismos que modulan el sistema inmunitario y que, en lugar de atacar el tumor, contribuyen a su crecimiento. Esta investigación se desarrollará durante los próximos tres años.

El melanoma es el tumor de piel más agresivo y con mayor capacidad metastásica: lesiones de poco más de un milímetro de grosor ya son capaces de extenderse por el organismo, y las metástasis suelen ser la principal causa de mortalidad. Aunque la investigación biomédica ha mejorado la supervivencia de los pacientes, aún no existen marcadores moleculares con los que se pueda predecir el desarrollo de la enfermedad y las primeras fases del proceso de diseminación.

La jefa del Grupo de Melanoma del CNIO, Marisol Soengas, quien lidera este proyecto, señaló que “no basta con comprender cómo se produce la metástasis, sino que también queremos tratarla". Para ello, "analizaremos las señales del sistema inmunitario que facilitan que el melanoma progrese, describiremos los mecanismos que las regulan y trataremos de validar compuestos que puedan bloquear estos mecanismos”.

En la convocatoria también ha sido seleccionado un proyecto del IRB Barcelona que cuenta con la participación de Óscar Llorca, jefe del Grupo de Complejos Macromoleculares en la Respuesta a Daños en el ADN del CNIO. El equipo, coordinado por Manuel Palacín desde el IRB, describirá la estructura atómica de una proteína clave en la activación neuronal, que está en el punto de mira para el desarrollo de fármacos contra enfermedades neurológicas como el alzhéimer o la esquizofrenia y también para la recuperación neuronal tras lesiones producidas por ictus.

“Como parte de una estrecha colaboración entre los dos grupos, utilizaremos criomicroscopía electrónica para definir por primera vez la estructura atómica de esta proteína y determinar su papel en la fisiología del cerebro. Esta información será clave para mejorar el diseño de fármacos dirigidos a ella en condiciones como un accidente cerebrovascular, el Alzheimer o la esquizofrenia”, explica Llorca. El proyecto tendrá una duración de tres años.

(SERVIMEDIA)
01 Sep 2020
ABG/pai/gja