Durante su intervención en la inauguración del encuentro de presidentes provinciales e insulares del PP, que se celebra hoy y mañana en Córdoba, Cospedal advirtió de que "subir los impuestos es una medida ineficaz, que daña tremendamente a las clases medias y que va a retrasar la recuperación económica de España y la creación de empleo". Además, aseguró que los planes en los que el Gobierno ha gastado cantidades "ingentes" de dinero como el Plan E "no están dando frutos", a tenor de la tasa de paro del 18%, el doble que la media comunitaria.

Dirigiéndose ya a los presidentes del PP, Cospedal les dijo que "ya ha pasado el tiempo de sufrir y pasarlo mal, el tiempo de que sólo estábamos oyendo hablar del acoso y de campañas contra el PP. Ahora es el tiempo de preparar el impulso definitivo". Por ello, señaló que los dos cometidos fundamentales del PP en la actualidad son "hacer oposición y demandar al Gobierno que atienda sus obligaciones" y "poner encima de la mesa su alternativa", ya que "el Gobierno nos está hundiendo cada vez más y la gente necesita saber que hay alternativa".

Cospedal lamentó que, frente a la "tremenda" crisis económica, política y social, "tenemos a un presidente del Gobierno inconsistente, improvisador, resentido, profundamente sectario y fundamentalista de una ideología caduca". "Zapatero", añadió, "ni puede ni sabe resolver las encrucijadas en las que se encuentra nuestro país porque sólo entiende del corto plazo, de la pequeña táctica política para ganar un puñado de votos aquí y allá y carece del coraje y la grandeza suficiente para liderar el país en estos momentos".

Por eso, a su juicio resulta "urgente e imprescindible el cambio político que tenga como prioridad gobernar para todos y que no utilice la ideología, como hace el actual presidente del Gobierno, ni como frontera ni como burladero". Cospedal recordó la apuesta por su partido por una política de austeridad, sin subir los impuestos, y vio difícil llegar a un acuerdo con el Gobierno en materia económica pero "Zapatero permanece impasible, sordo, soberbio, en esa atalaya alejada del sentido común".

Fuera del ámbito económico, la secretaria general del PP propugnó reformas estructurales en la justicia, la energía y la educación. Recordó que el PP lleva pidiendo una reforma en materia educativa más de un año, porque "España necesita un modelo completamente contrario al que lleva sustentando el Partido Socialista desde el modelo LOGSE". En concreto, un modelo "basado en la calidad, que tenga como objetivo la excelencia y el principio de respeto al profesor y al trabajo bien hecho, así como los principios de convivencia y respeto a los demás como ejes vertebradores del sistema educativo español, fuera de cualquier política partidista que quiera ideologizar a los jóvenes o sentar criterios partidistas".