Arenas se reunión hoy en la sede popular de la calle Génova con el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, y con los principales candidatos del partido en Euskadi, para conocer su posición sobre posibles acuerdos poselectorales y diseñar la estrategia de acuerdos con otras fuerzas políticas.

Por el momento, el PP sólo contempla la posibilidad de llegar a acuerdos en Euskadi con el Partido Socialista. Los populares pertenden que el diálogo y los compromisos resultantes sean comandados or las direcciones nacionales de las dos formaciones, lo que no significará en ningún caso la "marginación" o el "menosprecio" de ninguna de las organizaciones en su ámbito regional.

Javier Arenas explicó que su intención es alcanzar pactos en todos aquellos municipios o instituciones en los que el PP o el PSOE hayan sido las fuerzas más votadas. Según este criterio, el partido con mejores resultados electorales sería el encargado de formar gobierno con el apoyo del otro. En caso de no ser ninguno de os dos partido el más votado, ambos tendrán que reflexionar sobre si es conveniente sumar sus fuerzas para arrebatar la responsabilidad de gestión al que haya ganado los comicios, como es el caso de Bilbao.

Según explicó Arenas, el Partido Socialista es la única fuerza política con la que el PP coincide en una defensa clara de un marco de convivencia plural y en la defensa de la Constitución, el Estatuto de Gernika y las instituciones democráticamente constituidas.

El PP no contempla en este mometo la posibilidad de que el PSOE opte por pactar en unos territorios históricos con el PNV y en otros con el PP porque "estamos completamente seguros de que van a ser coherentes" y, por tanto, no llegarán a acuerdos con quienes mantienen un pacto de gobernabilidad con EH.

Arenas rechazó las acusaciones de frentismo que pueden derivarse del cierre de un acuerdo entre las dos fuerzas no nacionalistas y aseguró que ha sido la actitud excluyente y esta vez sí frentista del PNV y sus socios de EA y EH. "Esel margen que nos queda en el País Vasco", sentenció.

La dirección del PP apuesta, por tanto, por un acuerdo global que coprometa a las dos partes en toda Euskadi, cuya negociación sea dirigida por las dirección nacionales de los dos partidos y que en ningún caso pueda verse condicionado o interferido por la actuación de ninguna de las partes en el resto del territorio nacional.

Sobre la colaboración del PP y el PNV en el Parlamento de Madrid, el secretario general popular dijo que la formación ncionalista "está votando lo que quiere desde hace tiempo en el parlamento sin dar muestras de estar condicionado por ningún acuerdo".

Juzgó que un cambio de escenerio sólo se podría dar en el País Vasco si EH condenara la violencia, si ETA hiciera definitiva la tregua y si hubiera una ruptura efectiva del pacto de gobernabilidad entre el PNV, EA y EH, lo que a su juicio "sería una muy buena noticia" que, sin embargo no espera que se produzca.