En la operación han sido detenidas 21 personas en la isla de Ibiza y en las provincias de Barcelona y Girona, tras efectuar un total de ocho registros en domicilios y locales e intervenirse ocho kilos de drogas sintéticas (ketamina y éxtasis), 38 kilos de marihuana en forma de cogollos secos dispuestos para su comercialización y 4.500 plantas de un total de 4 plantaciones desmanteladas (3 en interior y 1 en exterior), útiles informáticos y electrónicos, documentación, 45.000 euros en efectivo y un vehículo con un sistema de ocultación mediante ‘doble fondo’ que era utilizado para el transporte de droga entre la península e Ibiza.

También ha sido incautada una escopeta con la que uno de los miembros de la banda hizo frente a los agentes al irrumpir en uno de los inmuebles. El detenido pensaba que estaba siendo objeto de un “vuelco” (robo de droga por parte de una banda rival), por lo que depuso su actitud al percatarse de que se trataba en realidad de la Guardia Civil.

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de octubre de 2019, tras ser detectado un grupo de personas residentes en las Islas Baleares que presuntamente se estaban dedicando al tráfico de drogas sintéticas. Parte del estupefaciente producido era transportado oculto en equipajes desde distintos puntos del territorio español a Estados Unidos, concretamente a la ciudad de Miami (Florida), para lo que usaban 'mulas' que eran captadas a tal fin para viajar a ese país llevando la droga dentro de su organismo.

Una vez identificados los responsables de dichas actividades delictivas, a través de canales de colaboración policial internacional, se estableció un equipo conjunto de trabajo con la Agencia HSI (Homeland Security Investigations) de Estados Unidos, lo que facilitó la detención de tres personas en Miami y dio lugar a la incautación de 15 kilos de MDMA en píldoras y 14 kilos de ketamina líquida.

Paralelamente, en territorio español se detuvo en Barcelona a una persona con 18 kilos de MDMA en píldoras y a otra persona en Palma proveniente de Ibiza con 14 kilos y medio de MDMA en píldoras, que también ejercían de mulas para la organización.

Las limitaciones de viajes internacionales por la pandemia de Covid-19 les obligaba actualmente a suministrar las drogas principalmente en fiestas privadas de la isla de Ibiza, para lo que era trascendental el papel que jugaba el líder de la organización criminal a la vez como distribuidor a contactos de discotecas y otros locales.

La Guardia Civil ha incautado a la organización sustancias para la confección y tráfico de aproximadamente 120.000 comprimidos y atribuye a este grupo la distribución y exportación a lo largo de al menos tres años una cantidad de pastillas que superaría la cifra de 2 millones de comprimidos.