Así lo aseguró el viceconsejero de Sanidad, Antonio Zapatero, en declaraciones a la prensa durante una visita junto al vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, al municipio de Fuenlabrada, donde el gobierno autonómico realiza hoy pruebas PCR de forma masiva para tratar de localizar casos asintomáticos.

Zapatero se preguntó si es posible “cerrar Villaverde sin que se cierre Usera” o viceversa, ya que los barrios están unidos unos de otros y el virus no entiende de límites o fronteras.

No obstante, indicó que “si la pandemia va a más”, el gobierno de Isabel Díaz Ayuso “hará lo que tenga que hacer legalmente” para frenar la enfermedad. Por ahora, recalcó que la situación que vive la comunidad “no es lo de marzo y abril” pese a la detección de más de mil positivos diarios.

Zapatero señaló que lo sucedido en Madrid al inicio de la primavera “era explosivo” y ahora “no es lo que está pasando” porque el contexto y el desarrollo de la enfermedad es “distinto”. Por eso, defendió la necesidad de realizar pruebas masivas como las de la semana pasada y esta en los barrios y localidades más afectados, que ya han testado a “más de 11.500 personas”.

El viceconsejero admitió que la Comunidad de Madrid tiene un “problema de estructura” para evitar los contagios de Covid-19 por tratarse de una región “pequeña y muy poblada”, lo que facilita el contacto entre personas y la diseminación del coronavirus en barrios y localidades, como los que en el sur tienen actualmente índices superiores a 700 casos por cada 100.000 habitantes.

Por eso, defendió la conveniencia “metodológica” del sistema de pruebas PCR masivas para conocer cómo avanza la enfermedad y descubrir que el porcentaje de asintomáticos está rondando el 2,5%, lo que supone más de 300 positivos hasta el momento. De ellos, apuntó que el 35% “no tienen capacidad infectiva”.

Tanto el vicepresidente Aguado como el viceconsejero Zapatero anunciaron que la Comunidad de Madrid va a comprar “más máquinas” de marcas diferentes para realizar pruebas PCR y precisaron que los casos de retraso en los resultados son minoritarios -salvo en un “hospital concreto”. Destacaron que la región está haciendo “en torno a 20.000 pruebas diarias” a los madrileños y que “de forma mayoritaria” se cumple el “compromiso” de dar el resultado en menos de 48 horas.