En declaraciones a los medios de comunicación en París, Calvo subrayó que la inmensa mayoría de esos autos son “muy comprensivos y muy colaboradores” con las medidas que necesita España para seguir combatiendo el incremento de contagios de Covid-19.

Sin embargo, cuando ocurre como en la Comunidad de Madrid, donde un juez ha echado atrás las medidas de restricción de ocio y de obligación de medidas de precaución, las comunidades autónomas los pueden recurrir.

El procedimiento, aseguró, permite distinguir el necesario control judicial de todas las medidas que afectan a los derechos de los ciudadanos, y la obligación de los gobiernos autonómicos de seguir tomando medidas en el ámbito de sus competencias.

Añadió que el Gobierno está trabajando en la “coordinación y colaboración más absoluta” con las autoridades autonómicas, y concluyó que el sistema “funciona como está previsto”.

Sobre la necesidad de mantener abiertas las fronteras europeas, abogó por “ponderar” los diferentes intereses, por un lado preservar la salud y la vida de los ciudadanos, y a la vez tomar decisiones que permitan superar la crisis sanitaria y también las consecuencias que provoca en los ámbitos laboral y económico, para lo cual es necesario mantener el mercado único y el espacio Schengen “en las mejores condiciones”.